Florentino Pérez, OK a la ‘operación limpieza’: la vía James Rodríguez
Al Real Madrid le están ahogando estos futbolistas y se va a desprender de ellos
Saben ustedes que a la salida de James Rodríguez se le trató de dar desde el Real Madrid una imagen honrosa, pero luego estalló la cruda realidad (de la que por cierto sorprenden las pocas consecuencias mediáticas, de los aficionados, sobre uno de los fichajes más caros de la historia de la entidad de Concha Espina): el jugador, con mercado y vigencia, se fue gratis al Everton, un club de la liga más rica del planeta, la Premier League. Esta es una de las patas más representativas de la desastrosa planificación del Madrid en estas tres últimas temporadas; sin embargo la entidad madrileña ahora está obsesionada con liberar fichas de las de antaño -es decir, altísimas- y va a recurrir a la operación limpieza radical por la vía James Rodríguez.
De hecho, no se extrañen si algunos de los descartes más evidentes de la plantilla -por los que el club pudo ingresar hace una o dos temporadas varios millones de euros, tal y como ocurrió con el colombiano- a decir; Isco Alarcón, Marcelo, Gareth Bale o Mariano, consiguen su libertad a coste cero, sin traspaso o compensación alguna por su venta de una entidad foránea. Hasta este punto de resignación ha llegado el club blanco con sus flagrantes equivocaciones - firmas por encima de su valor de mercado- con tal de sanear sus cuentas.
Y es que se tiene la esperanza de que algún club se lance, aunque sea por un precio simbólico, a realizar una oferta por estas piezas, pero hay un factor que hace prácticamente inviable desprenderse de todos ellos sin hondas concesiones: sus sueldos millonarios (como ocurrió con James) ¿Quién puede o quiere pagar 4 millones de euros limpios por temporada por el delantero hispano-dominicano? ¿Y 8,5 por Marcelo? ¿Y qué decir de los casi 15 del galés?
El error de frenada en la gestión de Florentino Pérez tras la tercera Champions League consecutiva, todavía con Cristiano Ronaldo, hace ya tres temporadas, hizo que se hincharan en demasía los sueldos de jugadores que ni se lo han ganado sobre le césped con su rendimiento ni esta temporada, como la anterior, han aportado al equipo, lo cual además les infravalora en el mercado. Por todo ello la vía James, que cobraba 8,5 kilos, se abre ahora con ellos cuatro: les darán la carta de libertad desde Madrid si con ello se pueden quitar de encima sus astronómicos sueldos, que son una rotunda losa para el club merengue.