Florentino Pérez hundió su carrera: el crack arrepentido de firmar

Asier Illarramendi protagonizó hace unos días una imagen histórica, que difícilmente pasará al olvido, no solo para los aficionados de la Real Sociedad, si no de todos los amantes del futbol. Porque levantó la Copa del Rey, nada más y nada menos que ante el eterno rival, el Athletic Club de Bilbao, tras ganar por uno en la final. De este modo, rompen con una larga sequía, y por una travesía que les llevó a jugar durante varios años en La Liga SmartBank.

Como capitán ‘txuri urdin’, pudo elevar el trofeo al cielo de Sevilla, si bien no pudo jugar el partido por una lesión. El vasco había soñado con algo así desde que solo era un crío, cuando entró en las categorías inferiores de Zubieta, y es su título más relevante. Al menos, el más especial, como ha admitido, y eso que también formó parte de la plantilla que ganó la Champions League, la Copa del Rey, la Supercopa de Europa o el Mundialito de Clubes con el Real Madrid.

Sin olvidar el Europeo sub 21 de 2013 con la selección española. Allí era una de las grandes estrellas, junto a Álvaro Morata, Isco Alarcón o Thiago Alcántara, y fue lo que le valió para fichar por el cuadro blanco, después de que Florentino Pérez le descubriera. Casi 40 millones de euros pagaron a los de Anoeta para hacerse con un jugador llamado a recoger el testigo de Xabi Alonso. No hace falta recordar cual fue el resultado final.

Dos años duró ‘Illarra’ en el Santiago Bernabéu, de donde guarda un recuerdo pésimo. Nunca llegó a adaptarse al vestuario, ni al juego del equipo, ni entró en los planes de Carlo Ancelotti. Fue duramente criticado por la prensa, por sus compañeros y por su propia afición, y acabó marchándose en 2015, de nuevo a la Real, por menos de la mitad de lo que costó en su momento. Para él, fue la peor etapa que ha vivido desde que está en la élite.

Y ahora, la historia se ha repetido, viendo como le han ido las cosas a Álvaro Odriozola.

Otro que puede volver pronto.