Florentino no espera más y mira a Alemania por el que apagará de raíz a Flick: así jugará el Madrid
Informes apuntan a una reactivación inmediata de la vía deseada
No son solo los resultados, también las formas. El Real Madrid se ha metido de lleno en un buen lío que está sobrepasando al actual gesto del equipo y el vestuario, un Carlo Ancelotti cuyo método de trabajo y filosofía de juego choca con el diseño de plantilla. Este rotundo desencuentro tuvo un primer drama en el Bernabéu ante el Barça (0-4) y amenaza con mayores reveses, de ahí que los blancos reactiven en Alemania e inmediatamente la vía deseada.
O lo que es lo mismo, Florentino Pérez ha vuelto a coger y abrir su carpeta de planes de futuro para salvar su nombre en caso de crisis, con el fin de motivar un giro drástico en el transatlántico merengue, que hace aguas. En ella surge el nombre de Xabi Alonso por encima del resto; de hecho, no hay más nombres en este momento que ilusionen y reúnan los condicionantes para dar cabida a un nuevo proyecto, a una modificación radical del equipo.
El alfa y el omega
Como decimos, el juego importa y el Madrid propone poco, es un caos táctico, defiende mal, construye peor y culmina menos de lo que debería: ahí surgen los pobrísimos datos de jugadores con un talento superior, como Jude Bellingham o Rodrygo Goes; también la efectividad de futbolistas de una talla enorme, como Kylian Mbappé. Y no solo ellos, los ‘cabeza de cartel’, también hay déficits en esos que esperan su momento, que nunca llega: los Endrick, Arda Güler, Dani Ceballos, Brahim Díaz, etcétera.
El plan con Alonso
Se da el caso de que los cambios que pretende introducir Florentino con el fichaje de Alonso (que no será sencillo, ya que tiene contrato, pero cuyos esfuerzos por conseguirlo ya han empezado) se asemejan mucho a los que llevó a cabo el tolosarra cuando firmó con el Leverkusen en octubre de 2022.
Para empezar, el fútbol vertical y propositivo del míster del Bayer cambió el posicional de Gerardo Seoane, su predecesor en el BayArena, curiosamente un técnico más dado a jugar con las armas que propone Ancelotti. Con Alonso el Madrid cambiaría de raíz, sumando un central al dibujo y muchísima presencia en campo contrario con dos laterales profundísimos, donde, por ejemplo, los fichajes pretendidos por el presidente del Real Madrid, Tren Alexander-Arnold y Alphonso Davies, tendrían todo el protagonismo ofensivo sin necesidad de un desgaste excesivo en defensa.
Con Alonso, las líneas de los centrales se adelantan mucho y se unen a las de los medios, disminuyendo el espacio entre ellas. Con ello hace participar a estos activamente en la construcción del juego, atrayendo el interés de los centrocampistas rivales y generando espacios en su estructura defensiva; entonces, su medular, sus carrileros y sus puntas, extremadamente móviles, hacen su función, embotellando al rival.
El entrenador español, en suma, promueve un fútbol más propositivo y dinámico, nada posicional; es decir, lo contrario que Carletto y algo que contrarresta a Hansi Flick.