Florentino encuentra la solución perfecta. Y de regalo llegan 40 kilos

La llamada final viene desde Londres y Zidane dice que sí

Florentino Pérez sabe que tendrá un problema esta temporada si no consigue dar salida a Gareth Bale. El galés, como es de sobra conocido, pretende salir del club, siempre y cuando reciba los casi 34 millones netos que le restan aun por cobrar de sus dos últimos años de contrato con el equipo blanco. ¿La solución? Florentino la ha encontrado en Inglaterra tras una conversación entre el agente del jugador, Jonathan Barnet, y José Mourinho. El equipo inglés pagaría al Madrid 40 millones por Bale, de los cuales 30 irían al extremo británico, o al menos, eso es lo que pretende el agente del extremo zurdo. El jugador no renuncia al dinero que tiene firmado mientras que el Madrid recibe 10 millones y libera a Zidane y a su plantilla de un bulto sospechoso. La operación, según hemos podido saber, ya está en marcha y Florentino ha dado el ok. A estas alturas de la película le da igual no ganar más dinero, pero quiere fuera a Gareth Bale. 

Pese a los movimientos iniciados por Barnet, el Madrid dudaba de una posible salida este verano. Aunque Bale ha dicho en una reciente entrevista que no le importaría salir y volver a sentirse futbolista, en el club no estaban tan convencidos. El año pasado pudo dejar el Real Madrid pero prefirió quedarse, en contra de lo que él mismo afirma ahora. Florentino está harto de la situación y la llamada de Mourinho le ha hecho ver la luz al final del túnel. Solo el portugués parece capaz de convencer al jugador. 

¿Por qué quiere Mourinho a Bale? El ex entrenador del equipo del Real Madrid sabe que puede sacar la mejor versión de un jugador que ya dominó en la Premier y que además necesita dar un paso al frente para liderar a Gales en la siguiente Eurocopa. En el penúltimo partido de la selección del dragón, el jugador fue sustituido durante el descanso, y ayer contra Bulgaria, en un partido que Gales ganó 1-0 con un gol en el 94, el extremo zurdo jugó todo el partido pero no brilló en ninguna faceta del juego. En su entorno se ha encendido la luz roja: no puede permitirse un año más en blanco.

Sin embargo, la incertidumbre y la precaución son los sentimientos que predominan ahora mismo en las oficinas del Santiago Bernabéu respecto al caso del jugador de Gales. Ya se la ha jugado demasiadas veces, aunque saben que, viendo el movimiento de su agente y las palabras del propio futbolista acusando al Madrid de no dejarle salir el año pasado, el jugador y su entorno ya mueven las cartas para preparar una salida nada agradable del equipo blanco. Bale quiere el dinero y marcharse por la puerta de atrás. Florentino está tan desesperado que le pagaría mañana mismo si el Tottenham pone en sus manos el dinero.

El caso se calienta y Zidane espera que se resuelva cuanto antes. No quiere volver a ver a Bale vestido de blanco y tener que convivir con él ni un día más en Valdebebas. El Tottenham y Mourinho tienen la llave de la salida más enquistada del Real Madrid en los últimos años.