Florentino abrirá champán con su salida: llegó a competir a Benzema y el Bernabéu no lo quiere ver
El delantero ha acabado con la paciencia de todo el madridismo y tras cinco años puede abandonar Chamartín
El paso de Mariano Díaz por el Real Madrid está llegando a su final, el delantero dominicano nunca se ganó un puesto relevante dentro de la plantilla blanca y hace muchas temporadas que el Madrid le busca salida. Sin embargo, con su contrato a punto de vencer, para la tranquilidad de Florentino y del madridismo, su futuro se alejará definitivamente de Chamartín.
Como ya contamos en Don Balón, el AC Milán está interesado en contar con el canterano del Real Madrid. Sin embargo, los italianos no son los únicos interesados en su incorporación, ya que según cuenta Calciomercato, el Leeds también se ha fijado en Mariano para ser el relevo de Patrick Bamford, que abandonará el club a final de temporada.
Los ingleses hace mucho tiempo que necesitan un goleador que acompañe a Rodrigo Moreno. En este sentido, han considerado que el dominicano puede volver a ser un jugador importante si cuenta con la confianza necesaria, algo que nunca tuvo en Madrid a diferencia de en el Olympique Lyon, donde tuvo una temporada de ensueño.
El papel de Mariano en su breve paso por la liga francesa fue muy bueno, mientras defendía la elástica del Olympique de Lyon, fue capaz de marcar 21 goles y repartir 6 asistencias en una gran temporada que le valió para ganarse la confianza del Real Madrid que necesitaba un goleador para sustituir a Cristiano Ronaldo y competirle el puesto a un Benzema más que discutido en ese entonces.
A diferencia de su paso en Lyon, Mariano nunca fue capaz de ser importante en Madrid, donde apenas ha disputado 81 partidos en 5 temporadas en los que solamente ha marcado 12 goles y repartido 3 asistencias. Unas cifras muy decepcionantes que lo mandaron directamente al ostracismo fuera quien fuera el entrenador.
Así pues, se acerca el final de una pesadilla que ha acabado desgastando más al Real Madrid que al propio jugador, que nunca tuvo la intención de abandonar el conjunto blanco, pues nadie quería igualar el sueldo que percibía en Chamartín.