La estrategia de Bartomeu contra Piqué, Messi y Suárez: ¡uno, fuera!

La guerra entre jugadores y directiva es total en el Barça

Se habrá ganado, pero es solo tiempo. Las circunstancias hacen que sea imposible hacer coincidir las opiniones e intenciones de los futbolistas culés con una directiva empeñada en pasar por encima de sus estrellas y fijar el ritmo y la dirección que ellos creen conveniente. Están en su derecho, dicen algunos, los jugadores deben jugar y poco más. Pero muchos pesos pesados del vestuario del Barça no opinan así y le han declarado la guerra a Josep Maria Bartomeu y su manera de hacer las cosas.

La eclosión y detonante del este proceso ha sido Neymar. Quizá algunos madridistas entonen en el futuro el mítico grito de Gerard Piqué “Gracias Kevin Roldán, contigo empezó todo”, pero en este caso mostrando su gratitud al 10 de la canarinha, porque este hecho se está enquistando y amenaza la estabilidad blaugrana. Porque cuando Luis Suárez, Leo Messi y Gerard Piqué miran al rincón del 11, donde debería estar Ney, solo ven a Antoine Griezmann. Es cierto que El Principito no tiene la culpa del dinero que se pagó por él, pero algunos sí se la echan porque por él y por su compatriota Ousmane Dembelé, Neymar sigue en París.

Y Dembelé hace tiempo que ha cansado a Ernesto Valverde, que se mordió la lengua al opinar sobre él al término del choque ante el Getafe, Leo Messi, Luis Suárez y Gerard Piqué. Aunque estos tres, más que al extremo galo, culpan el presidente de todo, por su falta de visión y planificación, y por no hacerles caso. Por su parte, Bartomeu cree que no tiene que dar explicaciones a nadie, le han molestado enormemente las palabras del central y, por tanto, ha tomado una resolución: quiere romper este triunvirato para disminuir el poder que tienen.

Lo de forzar la marcha de Leo Messi es un problema. Leo lo es todo en Can Barça y Bartomeu sabe que no puede enfrentarse directamente al argentino, saldría perdiendo siempre. Piqué, aunque menos fuerte, es también un estandarte del equipo y su posición es de una gran fortaleza, por lo que ha pensado en Luis Suárez como cabeza de turco. Sin él Messi será menos fuerte y deberá, si se queda, adaptarse a los fichajes que le traigan.

Bartomeu les dice a los tres que intentará lo de Neymar otra vez el próximo verano, pero en secreto sabe que está muy difícil y piensa en otros jugadores como Jadon Sancho o incluso Kylian Mbappé.