¡Estaba fuera hace un mes! El presidente iba a echarle y había sustituto

Zinedine Zidane se ha sobrepuesto a su mal inicio de campaña. A un mal inicio lleno de malas sensaciones, lesiones, problemas de disciplina (estos solo llevan el nombre de Gareth Bale), pero poco a poco se ha ido superando a si mismo y su proyecto ha comenzado a andar. Tarde, pero lo ha hecho. Lo suficientemente a tiempo como para seguir con la confianza que la directiva y Florentino tenían sobre él.

Y es que el ex de la Juventus sí que tuvo durante algún tiempo las espadas de Damocles colgando sobre su pescuezo. Una derrota, un empate, un mal partido. Quién sabe que hubiera pasado. El nombre de José Mourinho planeaba por el Santiago Bernabéu cada vez que Thibaut Courtois tenía que recoger un balón de su portería. Los silencios eran aún peor que los pitos para Zidane. El Bernabéu no silbaba porque ya no esperaba nada.

Y de esa nada ha salido el todo. Gracias a los jóvenes como Fede Valverde o Rodrygo, y al paso en frente de los veteranos como Toni Kroos o Casemiro. El Madrid es otro.

Otro entrenador que estaba en apuros era Albert Celades. Llego como sorpresa tras la destitución de Marcelino y muchos pensaban que no iba a durar en el cargo más de un mes. La tensión de la plantilla y la desconfianza en él eran patentes. Pese a los intentos de su capitán Dani Parejo de salir en su defensa y de recordar que el Valencia estaba por encima de cualquier entrenador o jugador. Pero las sensaciones que transmitía el equipo eran otras.

Sin embargo, en tres meses ha disipado todas las dudas. Y eso que el Valencia, con Jorge Mendes de por medio, tenía otros planes si Celades no iba bien: José Mourinho. Sin embargo, en estos 3 meses Celades ha asentado al equipo en Liga y le ha clasificado como primero en Champions. Una gesta que no puede ser obviada.

A veces la confianza uno debe de ganarla. Y Celades lo ha hecho. Tiene todo el crédito.