Él propulsa la decisión más difícil de Florentino, que echa a un icono
No será una despedida fácil para el jugador
La competición europea ha dejado varias conclusiones que los mejores clubes del mundo se han encargado de anotar de cara a sus respectivos proyectos. La búsqueda nuevos jugadores por parte del Real Madrid y FC Barcelona tras el mal comienzo de temporada ha catapultado a alguno de los mejores de Europa a volver a aparecer en primer plano. Muchos grandes nombres han aparecido en la agenda de los dos mejores clubes de España, aunque finalmente no han terminado de llegar ninguna de las pretensiones más destacadas de Zidane y Koeman. Tras la primera jornada, hay un delantero que sí que ha marcado las diferencias y Florentino le ha vuelto a echar el ojo para no perderle de vista de cara al curso que viene.
Romelu Lukaku salvó un punto para el Inter de Milán en el debut de los nerazzurri ante el Borussia Mönchengladbach. Los alemanes se presentaron en tierras italianas como el 'caramelito' del grupo, pero han demostrado que pueden dar mucha guerra esta temporada en la Champions League, en un grupo en el que precisamente también se encuentra el Real Madrid.
El delantero belga fue el autor del doblete que rescató un punto en el primer envite europeo. Aunque los de Antonio Conte están mostrando un juego muy ramplón en comparación con el ofrecido la temporada pasada, Lukaku sigue en la misma tónica que hace unos meses y hoy en día es uno de los delanteros más en forma del continente. A pesar de haber sido cuestionado los últimos años por su forma física, no ha descansado hasta demostrar que atesora unas cualidades verdaderamente envidiables para ver portería, una de las claves que podrían vestirle de blanco al finalizar la presente campaña.
Por un lado, Florentino Pérez está muy satisfecho con el rendimiento que está ofreciendo el atacante del Inter, pero por otro teme que éste pueda fulminar las aspiraciones europeas de los merengues en el encuentro que enfrentará a los italianos con el club blanco el próximo 3 de noviembre en Valdebebas.
El presidente ya se ha cansado de que la plantilla acuse la falta de gol desde que se marchó Cristiano Ronaldo en 2018 y está dispuesto a poner sobre la mesa 70 millones para hacerse con los servicios de Lukaku. Sin duda alguna, la llegada del belga catapultaría a la rampa de salida a Karim Benzema, uno de los jugadores que pasarán a la historia del club, y a Luka Jovic, si es que no lo hace en el próximo mercado invernal.