El nuevo De Bruyne toma un avión a Madrid y deja pálidos a De Paul y Saúl: directo al 11 de gala

Simeone quiere contar con el futbolista lo antes posible

Solamente resta una semana de margen para que los clubs que así lo deseen muevan ficha en el mercado y, a fin de evitar sustos innecesarios a última hora, el Atlético de Madrid está cerrando un acuerdo con el Royal Antwerp con Arthur Vermeeren como protagonista.

El joven centrocampista belga, al que ya muchos catalogan como el sucesor generacional de Kevin De Bruyne, se destapó en la fase de grupos de la Champions League como toda una promesa emergente en el fútbol europeo. Es cierto que sus virtudes no fueron suficientes para que su equipo lograse el acceso a los octavos de final, pero el mismo Xavi Hernández se quedó impregnado con el futbolista de 18 años en los dos duelos que enfrentaron a estos clubs.

A colación de esto, el FC Barcelona también ha venido mostrando cierto interés en el fichaje de Vermeeren, pero los problemas económicos vuelven a echar por tierra los planes culés.

De ahí que ahora sea el Atlético de Madrid, por petición expresa de Diego Simeone, el que tenga todo de cara para concretar la llegada de Vermeeren en este mes de enero en lo que supondrá, para el técnico argentino, ya no solo contar con una baza extra en la pelea por los objetivos, sino un problema, un bendito problema en su plantilla.

Y es que el resto de centrocampistas del conjunto rojiblanco, tales como Koke Resurrección, Rodrigo de Paul o Saúl Ñíguez, están ofreciendo un nivel majestuoso en estas primeras semanas de 2024 y aquí Simeone tendrá que decidir quién es el sacrificado para dar entrada al nuevo De Bruyne.

Mirando a su escala de prioridades, podemos afirmar que Koke no será el damnificado, pero tanto el español como el argentino tienen razones para preocuparse por el fichaje de un Vermeeren que, previsiblemente, dejará sin hueco en el ‘11’ de gala a uno de ellos.