El guardaespaldas de Ronald Koeman se prepara para llegar al Clásico
El jugador ultima su preparación para llegar al partido más importante de LaLiga
Desde el pasado 6 de marzo, cuando Gerard Piqué se lesionó debido a una rotura del ligamento interno del ligamento de su rodilla derecha, el Barça ha echado de menos la presencia y la intensidad del central en el terreno de juego y, según se acerca el partido frente al Real Madrid, crece la incertidumbre con respecto a su asistencia el próximo 10 de abril en el Camp Nou para disputar el Clásico. El partido tiene capital importancia, ya que Barça y Real Madrid son segundo y tercero, respectivamente, de LaLiga y están separados por solo dos puntos y, el que gane, tendría mucho más a tiro al Atlético de Madrid del Cholo Simeone.
Por parte del jugador, Piqué está haciendo todos los esfuerzos posibles para poder disputar ese encuentro, su carácter ganador y la responsabilidad que tiene siendo uno de los puntales del primer equipo le empujan a luchar para poder llegar. De hecho, está acudiendo a las instalaciones del Camp Nou para entrenar incluso cuando tienen día libre, buscando recuperar las sensaciones en su rodilla y tratando de estar lo mejor posible para poder arriesgar. Él quiere estar en el partido por todo lo que representa, siendo, además uno de los jugadores que más veces ha disputado un Clásico.
Pero las recomendaciones de los servicios médicos del Barça van por otro lado, desaconsejan que el futbolista participe en este partido, ya que aún tiene molestias, y porque, aunque tenga el alta médica, no tiene el ritmo de competición, por lo que someter al cuerpo del jugador a un estrés físico como la que supone un partido de fútbol, puede provocar que Piqué se vuelva a lesionar y se pueda perder lo que resta de temporada. Por tanto, la pelota va a estar en el tejado de Ronald Koeman, que tendrá que decidir si es mejor contar con el defensa catalán de cara al enfrentamiento contra el Real Madrid o reservarle para asegurar su presencia en la final de la Copa del Rey el próximo 17 de abril. Desde luego que va a ser una decisión complicada, no podemos descartar que Piqué comience en el banquillo y, si se necesita, utilizarle unos minutos.