El cisma de Florentino acerca el adiós Sergio Ramos: recambio elegido
El presidente blanco es la víctima de la mayor sublevación en Europa
El Real Madrid se juega el título liguero en su compromiso de mañana frente al Villarreal, pero Florentino Pérez también está muy pendiente de la situación de varios de los jugadores blancos que en los últimos meses han sembrado un mar de dudas respecto a su continuidad en Chamartín, siendo Sergio Ramos y Raphael Varane las dos mayores preocupaciones del presidente de cara a su futuro proyecto.
Bies es cierto que la incorporación -ya cerrada, al parecer- de David Alaba supone un gran movimiento por parte del club, pero las más que probables salidas de Varane y Ramos hacen de la necesidad de incorporar otro central una terrible urgencia. A pesar de que Éder Militão y Nacho Fernández han rendido a las mil maravillas en el segundo tramo del curso, el eje central de la zaga blanca quedaría compuesto por estos dos futbolistas más el jugador austriaco, cuya llegada se hará oficial de forma inminente.
Es aquí donde radica otro de los problemas de Florentino Pérez, que no parece estar dispuesto a ceder las exigencias del futbolista camero y que está dispuesto a incluir a Varane en la operación por Mbappé si se presenta la oportunidad, como así parece que se dará según las últimas informaciones. Es más, la formación que ha estado empleando Zidane en los últimos encuentros -apostando por defensa de 5 hombres, con 3 centrales y 2 carrileros- aviva aún más la necesidad de realizar otra incorporación para la defensa blanca. En este sentido, el mandatario merengue tiene en mente tres nombres que esta campaña han dejado prestaciones altamente reseñables: Jules Koundé, Pau Torres o Milan Skriniar, uno de ellos vestirá de blanco el próximo verano si nada se tuerce en el plan de Florentino.
Eso sí, las cuentas del Real Madrid no atraviesan su mejor momento y en vistas a que la gran parte de los recursos económicas están destinada a intentar el fichaje de Mbappé, la incorporación del central no superará los 50 millones de euros, o así al menos han filtrado diversos medios sobre la intención de Florentino Pérez a este respecto: golpe de efecto.