El casting de Florentino y Laporta es el mismo: Harry Kane, Kvaratskhelia, Musiala y poco más

El gol en Europa se paga muy caro y sobre todo escasea

El delantero centro del Real Madrid y actual Balón de Oro, Karim Benzema, no está ni entre los 40 jugadores con más influencia en el gol (goles y asistencias) en lo que va de campaña, quizá por eso el Real Madrid esté pensándose dar el resto por un punta referencial en próximas ventanas de transferencias. También el Barça tiene abierto su casting, pero, ¿hay posibilidades? Y de haberlas, ¿cuántas?

Pocos y muy caros

Hay pocos jugadores esta temporada que garanticen un elevado número de goles en el primer nivel de la élite del futbol europeo, es decir, en los entornos de la Premier League, LaLiga, la Serie A, la Bundesliga o la Ligue 1, además de la Champions League y la Europa League. El mejor, Erling Haaland, que ha anotado 42 tantos y dado 5 asistencias en 37 partidos, es casi imposible que salga el próximo verano del City; es más, se duda de que lo haga en 2024. Kylian Mbappé, con 31 tantos y 8 asistencias, también está en la misma tesitura.

Solo el 30 de París

De los más destacados jugadores en ambas facetas, solo Leo Messi (18 tantos y 17 asistencias) parece una posibilidad de cara a verano y por condicionantes evidentes esta solo sería posible entre los dos grandes del fútbol español para el Barça. Su compañero Neymar, con cifras parejas, está ligado al PSG, como Cody Gakpo (17-17) o Mo Salah (22-11) lo están al Liverpool. Victor Osimhen (25-5) o su compañero de equipo Khvicha Kvaratskhelia (14-16) tienen contrato en vigor con el Nápoles. Y la lista continúa en la misma dirección.

Para irnos a jugadores con gol y que salgan el próximo verano sin grandes costes, es decir, que sean agentes libres y por tanto accesibles, hay que mirar a jugadores como Firmino o Marcus Thuram, porque ya sabemos que futbolistas como Harry Kane (23-4), Kolo Mouani (16-14) o el jugador del Bayern, Jamal Musiala (15-12), como los primeramente señalados, costarán ingentes cantidades de dinero. Ni es fácil ni es barato el acceso a los grandes cracks.