El Camp Nou en estado crítico, los problemas se acumulan
El estadio tiene graves problemas que requieren una actuación urgente
El Camp Nou es una estructura hecha de hormigón y acero cuya construcción finalizó en el año 1957, como muchos edificios o puentes de aquella época, con el paso del tiempo comienza a tener problemas estructurales. Estos fallos se manifiestan de manera externa con grietas o con el efecto ‘arena’ del hormigón. Es decir, años de humedad, contraste de temperatura, soporte de peso variable y otros factores provocan que la estructura sea cada vez más débil y, poco a poco, más inestable. Son dos los factores que afectan a la construcción: la degradación del hormigón, llamada ‘carbonatosis’ y, algo muy común a las estructuras de aquella época, el amianto. Esto supone un problema, sobre todo cuando el edificio ha estado desocupado, pues el deterioro cada vez es más grande. El problema del amianto, por muy preocupante que pueda parecer, solo implicará un especial cuidado cuando se acometan las obras de reparación, o de demolición. Porque solo hay esas dos posibles soluciones.
Y eso es lo que van a tener que decidir los candidatos a la presidencia, o repararlo y esperar mejores tiempos, en lo que a lo económico se refiere, o tirarlo y hacerlo de nuevo. Esta decisión lleva demasiado tiempo demorándose en los despachos, la junta de Bartomeu trató de impulsar una reconstrucción con lo que llamaron el Espai Barça, retomando un esbozo de proyecto que comenzó el principal candidato, Laporta, pero su excesivo presupuesto, de 900 millones de euros, y los problemas que se han generado en las arcas blaugranas a raíz de las malas inversiones y, por supuesto, las enormes pérdidas que ha causado la pandemia, es un proyecto que está en dique seco.
El nuevo presidente, cuando sea elegido, tal vez va a tener que pensar más en este problema que en la necesidad de fichar jugadores por valor de millones de euros. El Camp Nou es la casa del Barça, y no puede estar cayéndose a pedazos. De entre todos los candidatos, solo Laporta parece tener un proyecto para atajar este problema. Pero es evidente que se trata de algo que no se puede seguir posponiendo.