El Barça acepta la petición de Messi: se marcha con una condición

Club y jugador verán sus caminos separados por primera vez desde el año 2000

“Lo pactaría antes de llegar a la presidencia”. Así de rotundo se ha mostrado el precandidato a la presidencia del Fútbol Club Barcelona, Jordi Farré. Y es que uno de los posibles presidentes del Barcelona en las elecciones que están a la vuelta de la esquina ha dejado muy clara cuál es su postura con respecto al jugador franquicia del club, el argentino Leo Messi.

Para Farré el astro de Rosario debe decidir dónde quiere jugar y cuándo quiere hacerlo, “es algo que se ha ganado a pulso” ha afirmado el posible futuro máximo dirigente culé. Lo cierto es que una gran parte de la afición del Barcelona así lo creía hasta el asunto del burofax este verano, ya que aquel hecho hizo cambiar en muchos aficionados la opinión al respecto en favor del club y detrimento del atacante.

Pero para Farré está fuera de toda duda que si Messi quiere jugar un año en Argentina antes de retirarse debería tener el permiso del club catalán para hacerlo y así sería si él es el presidente. Newell´s Old Boys es el club donde Messi dio sus primeros toques a un balón de fútbol, hasta que a los 13 años firmó por el Barcelona y el jugador siempre ha mostrado interés en poder jugar al menos un año en su club y en la liga de su país antes de colgar definitivamente las botas.

Ahora bien, el Barcelona si que le pide a Messi que tras su aventura volviese a Barcelona para jugar hasta que él quiera retirarse o que si decide dejarlo tras su estancia en Argentina vuelva al club de la ciudad condal para desempeñar cualquier otro papel, ya fuese el de embajador, presidente honorífico o lo que fuese necesario. Lo que sí tiene claro Farré y su equipo de campaña es que la marca Messi y Barça deben ir de la mano para lograr en los próximos años facturar todo el dinero que les sea posible, algo de lo que podrán beneficiarse ambas partes.

Ahora está por ver qué ofrecen el resto de candidatos al argentino y cuál es la postura que este toma para con los candidatos. Lo que está claro es que más de 20 años de relación no pueden terminarse con un triste burofax.