Distintos jugadores, misma idea

El Cholo prepara la temporada siguiente

Año tras año, el Atlético de Madrid capitaneado por el Cholo Simeone busca reinventarse y confeccionar una plantilla que le permita seguir siendo ese equipo tan competitivo que está siendo durante las últimas temporadas.

Desde que el argentino llegase a la disciplina del Manzanares, el equipo ha mantenido una filosofía e identidad que le ha llevado a vivir grandes noches, alzando títulos importantes como la Liga o a Europa League. Y no solo eso. En la máxima competición europea, la Champions League, los rojiblancos consiguieron llegar 2 años a la final, perdiendo en ambas ocasiones.

Cada mercado de fichajes, la entidad realiza un sinfín de operaciones tanto de salida como de entrada para buscar que ante todo el equipo no pierda esa garra y esa forma de competir que le ha llevado a ser uno de los más grandes de Europa.

Son muchos los futbolistas que han pasado por el Manzanares y el Wanda, pero por encima de todos ellos existe una premisa que prevalece y que es fundamental en los planes del técnico: el estilo no se toca.

Con el 4-4-2 que ha implantado Diego Pablo Simeone el equipo se muestra muy sólido en defensa y rápido y contundente al contragolpe. Cuando el técnico planea lo que será la temporada siguiente, los jugadores escogidos se eligen en base al estilo y a está definida forma de entender el futbol. Centrales férreos y rápidos al corte, laterales con un buen nivel defensivo y con buena técnica a la hora de poner centros al área, mediocentros posicionales muy inteligentes y que hagan la función de termómetro del equipo, interiores desequilibrantes pero con mucho sacrificio a la hora de defender y delanteros físicamente portentosos con buen juego dentro del área y con buena definición de cabeza.

Un verano más, el Cholo se enfrenta a la difícil misión de consolidar un conjunto que se adapte a las cualidades recientemente mencionadas y que mantenga el sello competitivo intacto. Para ello, deberá encontrar los hombres que puedan desempeñar con eficacia sobre el verde aquello que quiere transmitir el técnico y que tanto le define.

Para la campaña que arranca el mes de agosto Siemone perderá a algunos de los que han sido los baluartes de los anteriores proyectos. Es por eso que el argentino está ante uno de los retos más complicados desde su llegada, ya que no solo tendrá que añadir a su equipo alguna pieza que complemente las bases, sino que tendrá que buscar unos cimientos sólidos sobre los que construir el Atleti del futuro.

Veremos si es capaz de volver a reinventarse y crear un equipo de garantías para volver a luchar por todo.