Discusión enorme entre Koeman y Bartomeu por el primer crack del Barça

Tantas incógnitas pesan sobre el nuevo proyecto en Can Barça, son tantos los inconvenientes y el ruido externo, que parece, como así piensan muchas voces internas en el club azulgrana, que el problema de este Barça no estaba solo en el banquillo; también hay una problemática en el palco y en los vestuarios, con el presidente y los jugadores implicados. Koeman, recién llegado, ya ha hecho sus primeras peticiones y hay una sobre una estrella que a Bartomeu le chirría, ¿resultado?: primer encontronazo entre el míster holandés y el máximo mandatario azulgrana.

Y es que a quien menos esperaba Bartomeu encontrar entre la lista de jugadores favoritos del neerlandés es a Philippe Coutinho, auténtico descarte blaugrana y principal modo de engordar las arcas culés para este mercado veraniego. El brasileño siembra dudas en todos los estamentos por su pobre rendimiento en su primera temporada vestido de azulgrana. Pero Koeman discrepa, cree en él y no solo eso, lo ve fundamental.

Bartomeu no quiere entrar en un debate con Koeman desde el primer día y va a ceder a sus súplicas. De esta forma, sin los ingresos de la venta o cesión de Coutinho (cobra algo más de 12 millones de euros por temporada) y una crisis económica galopante sacudiendo la estabilidad del club, hay que buscar nuevas formas de sanear las cuentas y eso incluye echar al menos a cierto galáctico. De esta forma Koeman sabe que la permanencia del carioca supone la venta de otro de los elementos del firmamento blaugrana, léase Leo Messi, Luis Suárez, Antoine Griezmann u Ousmane Dembelé.

Así las cosas y de mutuo acuerdo entre el preparador y el directivo, Coutinho ya ha adelantado en la lista de preferidos al uruguayo y a El Mosquito, y ambos tienen ya colgada la carta de transferibles por encima de Philippinho. Ni qué decir tiene que la opción Suárez no solo deja boquiabiertos a varios integrantes de la plantilla, entre ellos Messi, sino al mismo charrúa, que se siente insultado por el club. Pero la suerte está echada: Coutinho va a ser clave para Koeman; no así, en principio, Suárez o Dembelé.