Después de reafirmar a Xavi, los culés ya lamentan la decisión: Flick y Rafa Márquez se reirán de él
El presidente blaugrana no encajó nada bien la derrota a manos del Girona
Cuando parecía que las aguas alrededor del futuro del banquillo del Barça se iban tranquilizando, parece que se está comenzando a formar una especie de tormenta perfecta sobre Xavi, Joan Laporta y el puesto de entrenador. Y es que, tras la dura derrota a manos del Girona por un contundente 4-2, el presidente blaugrana se mostró realmente frustrado tanto por la derrota como por el juego del equipo, dejando claro que, al igual que todos los culés, no quedó nada satisfecho ni con los jugadores ni con su recién ratificado entrenador.
Y es que una semana después de que el Barça anunciara oficialmente que tanto el club como Xavi habían cambiado de opinión al optar por la continuidad del egarense, parece que todo ha comenzado a desmoronarse sobre un Xavi que, pese a asegurar en rueda de prensa que no habría dudas sobre su continuidad, ya tiene todas las miradas puestas sobre él.
La monotonía de Xavi antes que un giro de guion
Si hasta ahora se veía que contar con el egarense en el banquillo era la decisión de mayor cordura, la realidad es que ahora parece que es una apuesta por la monotonía, la mediocridad y la falta de resultados. Pues, antes de arriesgarse con un cambio total de guion mediante la entrada en escena de Hansi Flick o Rafa Márquez, el presidente Laporta optó por seguir con un Xavi que ya no ilusiona ni a la afición ni parece convencer a sus jugadores.
Ante esta tesitura, será fundamental ver el desenlace de la temporada y la posición del Barça en esta liga. Pues, hoy en día, acabar en segunda plaza es una absoluta prioridad de cara a tener el derecho de jugar la Supercopa de España, un premio que, más allá del trofeo -no especialmente relevante- sí que implica un ingreso que no se puede dejar escapar.
Sin embargo, la realidad actual de los culés es que son terceros a un punto del Girona y que no depende ni de Xavi ni de nadie más que los de Michel decidir si esa segunda plaza es blaugrana o roja y blanca.
Así pues, ni una semana ha durado la tranquilidad alrededor de Xavi, pues la dolorosa derrota ante el Girona, que, de paso, ha dado la liga al Real Madrid, ha comenzado a generar una especie de tormenta perfecta que podría acabar realmente mal.