Demoledor gesto de Lewandowski: deja KO a Laporta y Xavi lo ve lejos
El delantero vuelve a vestir la camiseta del Bayern de Múnich
Joan Laporta ha comenzado recientemente a dar pasos en el mercado de fichajes y avanzar con situaciones que parecían completamente bloqueadas. Los anuncios de Christensen y de Kessié son aire fresco para el Fútbol Club Barcelona, que al fin ve cómo puede remodelar una plantilla que la pasada temporada fracasó en todas las competiciones que disputó, pero todavía hay algo que al presidente de la entidad le sigue trayendo de cabeza y es el caso de Robert Lewandowski.
Son ya varias las semanas de tira y afloja y de interés abierto por el delantero polaco. Incluso se han llegado a cruzar declaraciones públicas del propio delantero en las que ha pedido salir del Bayern de Múnich para poder recalar en las filas del Barça pero lo cierto es que la entidad alemana no va a ceder lo más mínimo y sigue esperando a que Joan Laporta suba la oferta y ponga sobre la mesa una cantidad que estimen suficiente como para dejar salir a uno de los mejores delanteros de los últimos tiempos rumbo a LaLiga.
Hay algo, no obstante, que juega claramente en contra del Barcelona y no solo es el aspecto económico. Es el tiempo. Las semanas siguen pasando y cada vez está más cerca del arranque de la temporada porque este año, con el Mundial a la vista, todas las competiciones empiezan antes de lo que es habitual y eso hace cambiar las estrategias para los fichajes en muchos casos. Así las cosas, los acontecimientos se van desencadenando y Xavi Hernández ve cada vez más lejos a su delantero soñado porque hoy mismo se ha producido un golpe de realidad.
Robert Lewandowski, que llegó incluso a amenazar con ponerse en rebeldía si no le dejaban salir para jugar en el Camp Nou, regresa a los entrenamientos con el Bayern de Múnich. El conjunto bávaro empieza a preparar su pretemporada y, por el momento, lo hará saliéndose con la suya y viendo al ariete polaco con el escudo del Bayern en su camiseta. Eso es un mazazo para Joan Laporta, que no obstante va a pelear por el delantero hasta el final y hasta donde se lo permita su maltrecha economía.