Decisión de Florentino Pérez en solo 48 horas: 2 nombres sobre la mesa

Ninguno de los dos equipos llega a este duelo decisivo en la competición doméstica sin urgencias, quizá más el Real Madrid, por lo que la incógnita sobre el resultado del choque es total. Ahora bien, por lo mostrado por uno y otro equipo y tan solo fijándonos en la leve ventaja que supone salir de local, el Sevilla de Julen Lopetegui parece un poco más favorito que el Real Madrid de Zinedine Zidane para el partido de este sábado (16.15, hora española). Y precisamente entre ellos dos, entre lo que representan el míster vasco y el francés, está la decisión más dura de Florentino.

Ellos son los dos últimos elegidos por el presidente para comandar un proyecto desde el principio de temporada en el Real Madrid, y tomando solo la segunda versión de Zizou -es decir, la que no ha ganado ninguna Champions League- ambos han tenido resultados nefastos. Ahora bien, con la enorme masa social y la opinión pública pidiendo la cabeza del entrenador galo, Florentino debe optar por echarle ante los malos resultados, como hizo con Lopetegui, o darle una confianza que nunca ha mostrado por ningún otro preparador.

Hay que resaltar que cabe la posibilidad de que el cuadro hispalense consiga la victoria y ahonde un poco más en las heridas que supuran desde el corazón del gigante blanco, hoy más pequeño que nunca, momento que dejaría la continuidad de Zizou todavía más en entredicho. Y si esto no ocurre el sábado puede suceder el miércoles, ente el Borussia, o el próximo sábado, ante el Atlético de Madrid, el caso es que Florentino debe ser claro y decir abiertamente cuál es su decisión: esperar a los resultados para tomar una decisión, como ya concretó con Lopetegui, o apostar con todas las de la ley, al estilo más fergusoniano, por Zizou, algo que jamás ha hecho.  

Y esa es la cuestión ahora en el seno del Real Madrid. Los jugadores y su líder, Zidane, están muy tocados, con la moral por los suelos y pocos recursos a los que agarrarse, por eso una ratificación total pueda ser el empujón que necesiten el vestuario y el míster para saber a qué atenerse de aquí hasta final de temporada: ¿todos a una y hasta el final o cada cual que mire por sí mismo porque todos están discutidos (salvo Florentino, claro está, que se ha perpetuado en su cargo? En definitiva, la decisión del mandatario en estas 48 horas hasta el inicio del partido va de lo que representa Lopetegui en el Madrid: es decir una apuesta arriesgada y con poco margen de confianza; o lo que puede ser Zidane, un manager y líder a largo plazo, durante una época, sean cuáles sean los resultados. Esa es la cuestión.