De Jong y Pedri despedazan al Barça y Xavi halla cupables: ¿João Félix, Yamal, Raphinha y Ferran?
La caída de los dos motores de la medular saca a la luz vergüenzas culés que se creían olvidadas
Las lesiones de Frenkie de Jong y Pedri se iban a notar en el Barça y vaya si lo están haciendo, de hecho, están empezando a causar estragos en el juego culé, el cual ya es más lento, previsible y vertical, con menos control, lo que permite fogonazos de la enorme calidad de la plantilla a la hora de mirar la portería del adversario, pero, a la vez, hace aflorar errores defensivos que cuestan puntos en esta liga, como sucedió ante el Mallorca. Con eso, Xavi quiere afinar tras varias citas rotando y busca culpables en su franja de ataque.
Oriol Romeu, Ilkay Gundogan y Gavi se han convertido y hasta nuevo aviso en el triunvirato de la medular culé, uno que ni mucho menos está equilibrado y ofrece las garantías que busca el míster blaugrana, lo que repercute en la línea defensiva, que busca refuerzos, pero también en la ofensiva, donde además de contundencia Xavi necesita más eficacia y trabajo en la presión sobre la salida de balón rival. O lo que es lo mismo, hay que buscar las mejores piezas posibles.
Celta y el equipo insular han sacado a la luz las complicaciones del actual plan azulgrana y hoy visita Montjuic un adversario peligroso, un Sevilla que viene de golear al Almería y que tiene en sus filas a viejos enemigos ancestrales de los culés, como Sergio Ramos. Pero ni la ausencia de De Jong y Pedri o la visita en LaLiga EA Sports de un equipo Champions League son excusas, de modo que quienes sean de la partida en el choque han de ser los que, hoy por hoy, reúnen más confianza en el preparador.
De la franja de ataque, Lewandowski parece el único indiscutible, ya que João Félix, que es otro futbolista con papeletas para ser titular, tiene menos trabajo que otros integrantes de la plantilla. Así las cosas, el portugués, Lamine Yamal, Raphinha y Ferran Torres se disputan dos puestos, que puede ser solo uno si Xavi apuesta por darle galones en la medular a Fermín López, lo cual, tras su gol al Mallorca, no es descabellado; en tal caso, las cartas serían aún más escasas y hasta el menino de ouro tendría opciones de ser carne de banquillo.