¡Crisis! El Barça al límite: Bartomeu o Messi ¡El crack, casi fuera!
El escándalo del presidente y el Barça con una empresa difamatoria es la punta del iceberg
El secreto a voces va a tomar cuerpo y forma en las próximas fechas, en el que es el enésimo traspié del Barça como institución esta temporada. Los hay de todos los colores y lo que es extraño es que los jugadores, pese a todo y gracias a su profesionalidad, mantengan la pelea con el Real Madrid en lo alto de la tabla clasificatoria, con opciones, incluso, de superarle en dos semanas en el Santiago Bernabéu. Pero ni con esas se tapa un lío mayor que va a estallar y tiene a los dos grandes líderes del Barça enfrentados: Leo Messi y Josep Maria Bartomeu.
El suma y sigue de inestabilidad en el FC Barcelona es incontable. De un lado empezó con la renuncia a Neymar por fin de existencias tras el traspaso forzado –y comprometido- de Antoine Griezmann, que no gustó en la plantilla; de otro pasamos por una planificación poco entendible, donde solo 16 jugadores forman parte del grupo como tal; y entre medias vivimos una serie de dimisiones en la cúpula culé y, últimamente, la surrealista pelea entre Eric Abidal y Messi por una ataque del primero contra el segundo. Sin embargo la cosa no acaba ahí. En la actualidad estamos inmersos en el presente casting de segundos delanteros para cubrir la lesión del primero (Luis Suárez), de un futbolista, Ousmane Dembelé, que es la peor inversión hasta la fecha en el historia del fútbol de élite y el puesto de un canterano, Carles Pérez, al que se le dio la patada. Podríamos seguir y todo ayudaría a restar.
Eso sí puede haber un final o una puntilla, porque la noticia publicada por la Cadena Ser en la que se aportan pruebas de la presunta trama para desprestigiar al propio crack argentino del Barça (y entre otros también a Gerard Piqué), y más allá a Joan Laporta –archienemigo de Bartomeu-, Víctor Font e incluso Xavi Hernández -leyenda del club que les rechazó como sustituto de Ernesto Valverde-, al que antes de todo esto el mismo director deportivo del club, ex compañero suyo en la plantilla, tachó de mentiroso, es bochornosa. Y no deja en buen lugar ni a la entidad, que es una vergonzosa espiral de deshonras, ni al máximo mandatario. Presuntamente.
Y este callejón sin salida, aderezado con mil y un envoltorios malolientes, solo puede conducir a dos sitios: la renuncia de Bartomeu y la convocatoria de elecciones, o por el contrario la marcha de la mayor estrella de todos los tiempos del Barça por la puerta de atrás (del Barça, claro, porque el mundo se rinde a su talento, como ayer hicieron los Laureus) Y ambas son factibles. De hecho, Messi se lo piensa con frialdad y de forma real, este último detonante ha sido clave para ello. Quizá hasta se lleve con él a su amigo Luis Suárez, otro de los enemigos del presidente. A día de hoy si los grandes transatlánticos del fútbol europeo saben jugar sus cartas, tentar a Messi y elevarle como lo que es, una figura inigualable, tal vez el astro decida cambiar por fin de elástica.
Es tal el maremágnum rocambolesco de esta temporada, que ya no nos sorprendería nada, ni positivo ni negativo. Quizá y curiosamente, con la que se viene encima (puede que en los próximos días), lo de menos sea el fútbol.