Camavinga provoca lo impensable con Luka Modric y Toni Kroos y ‘Carletto’ agradece este giro radical
El francés ha pasado de ser suplente a titular indiscutible
Las temporadas son muy largas y por ello los entrenadores de la élite están obligados a reflexionar continuamente sus decisiones para extraer el mayor jugo a sus plantillas y algo así ha sucedido con ‘Carletto’ en el Real Madrid con Eduardo Camavinga. El futbolista francés llegó en los últimos instantes del mercado estival de 2021 como una incorporación de mucho futuro para el club dada la juventud del centrocampista, pero su primera campaña en Chamartín apenas gozó de protagonismo por el nivel tan satisfactorio mostrado por Toni Kroos y Luka Modric.
Eso sí, los años no pasan en balde para ningún jugador y esta temporada tanto el croata como el alemán han acusado el exceso de protagonismo brindado por Ancelotti, algo que ha afectado negativamente a su rendimiento sobre el terreno de juego y que ha permitido la entrada en escena de Camavinga, no como un hombre dosificador, sino como la pieza indiscutible para acompañar a Kroos y Modric en la medular.
Aunque fue Tchouameni el futbolista que contó con mayor confianza por parte de su entrenador en los primeros meses de la temporada, en enero ‘Carletto’ cambió por completo sus prioridades dentro de la plantilla y Camavinga comenzó a gozar de oportunidades -primero como lateral izquierdo y posteriormente como pivote- que el francés ha aprovechado a las mil maravillas.
Esto, aproximándose el tramo final del curso y con dos títulos en juego para los blancos, la Champions League y la Copa del Rey, cobra el doble de importancia. Si algo han evidenciado Kroos y Modric en las últimas campañas es que necesitan contar con un escudero de garantías en el centro del campo para no verse obligados a realizar insufribles desgastes defensivos que posteriormente pasen factura al equipo.
Por ello, la presencia de Camavinga en el ‘1’1 de Ancelotti, atendiendo al nivel mostrado por el francés en los últimos meses, se postula como obligada para que el Real Madrid pueda remontar la eliminatoria copera ante el FC Barcelona y superar el cruce europeo ante el Chelsea, algo de lo que el técnico italiano está plenamente concienciado: es el mejor sucesor posible para Casemiro.