Bellingham va a sufrir, Carletto obligado a recular: nuevos intocables y señalados ante Las Palmas

El Real Madrid ha ido sacando resultados hasta la debacle del Metropolitano, que exige cambios

Jude Bellingham ha sido la mejor noticia para el Real Madrid en este arranque de temporada, aunque su llegada ha roto el ecosistema del equipo, dando un giro al sistema (o los sistemas) clásico de Carlo Ancelotti y esto está teniendo un impacto negativo en el juego que ha tomado un cariz dramático en el Metropolitano ante el Atlético de Madrid. De ahí que el míster italiano se vea forzado a un cambio de rumbo táctico, puede que incluso ante Las Palmas, con nuevos indiscutibles y señalados.

Vinicius, el principio de todo

Vaya por delante, como hemos recalcado en Don Balón, que el regreso de Vinicius va a dar un plus enorme al conjunto merengue, aportando justo aquello que es tan difícil controlar por los adversarios: desborde y desequilibrio. Con eso el Madrid ya va a obtener ante el conjunto canario un balón de oxígeno que seguramente repercuta positivamente en el resultado (lo contrario sería dramático). Ahora bien, el rombo provocado por la inclusión en el equipo de Bellingham, por varios motivos, ha desvelado sus múltiples defectos y Ancelotti va a romperlo.

Dudas

Teniendo en cuenta que al inglés se le considera un llegador, un mediapunta que juega muy cercano al área rival, volver a los viejos esquemas blancos del 4-3-3 o 4-4-2 exige una adaptación récord al ex del Borussia Dortmund, y no solo eso, con ese cambio debe haber sacrificados. El primero, que ya fue rechazado por Ancelotti en el derbi madrileño, Joselu, el cual va a perder su puesto en favor del de São Gonçalo. Pero hay más.

Si Ancelotti apuesta por reforzar la medular, dejando dos puntas, Rodrygo Goes también deberá ceder su puesto, con Valverde (semiextremo), Camavinga, Tchouameni y Kroos o Modric por detrás. Cabe la posibilidad de que el italiano envíe a Rodrygo a la derecha en la vuelta al triplete, donde dice estar menos cómodo, en cuyo caso Bellingham deberá ayudar en la construcción y perder presencia en el área rival, con una doble pareja de pivotes en los dos franceses, o situarse como falso nueve, con Valverde apoyando en la organización, que no es su fuerte. Menos probable es que el italiano tire de tres centrales y dos carrileros largos, donde las posibilidades se disparan. En cualquier caso, el rombo, que ha dejado vía libre de peligro a los rivales de los merengues por bandas, toca a su fin y Bellingham y Ancelotti han de encontrar el sitio para un cambio necesario y pertinente.