Bartomeu le da un ultimátum: o arranca, o se va del Barça

Se acaba la paciencia con un crack

En el Barça están realmente decepcionados con Arthur Melo. El internacional brasileño llegó el verano pasado procedente de Gremio de Porto Alegre, y pagaron 40 millones de euros, una cantidad importante por un jugador que era prácticamente un desconocido. Pero tenían muy buenos informes y se valoraban sus condiciones técnicas y su potencial.

Le dieron el ‘8’ de Andrés Iniesta, una muestra de la confianza que tenían depositada en él desde la directiva. Y lo cierto es que la afición y sus compañeros quedaron impresionados con su talento, su visión de juego, su calidad, su capacidad asociativa, su creatividad… parecía nacido para jugar y triunfar en el Camp Nou, y muchos ya le colocaban como el heredero de Xavi Hernández.

Sin embargo, el ‘canarinho’ se fue deshinchando a medida que avanzaron los meses, y acabó siendo suplente de Arturo Vidal, también debido a varios problemas físicos. Pero el bagaje de su primer curso fue realmente bueno, y aprobó con nota. Ya en este, plenamente consolidado, esperaban que diera un paso adelante y comandara el centro del campo junto al fichaje estrella, Frenkie de Jong. 

Algo que, de momento, no ha hecho. Su mala pretemporada, por culpa de la disputa de la Copa América, la cuál conquistó, aún le pasa factura, y su nivel está lejos del esperado. Tanto es así que apenas ha jugado en 12 encuentros, en los que ha rendido bien, e incluso ha marcado dos goles y ha dado cuatro asistencias. Pero de vuelta las lesiones le acechan y, a día de hoy, Ivan Rakitic le ha comido la tostada.

Aún es joven, 23 años, y confían en él, pero esperan que los próximos meses le dé la vuelta a la tortilla. A estas alturas esperaban que ya fuera un fijo para Ernesto Valverde.

En el Barça no hay paciencia infinita…