Bartomeu está como loco con el notición: oferta Premier de 65 'kilos'

Ha caído como una bomba en Barcelona por ser quien es y ni siquiera Leo Messi se ha opuesto a la venta del joven jugador cuando ha tenido noticia de que es una de las posibilidades de esta ventana de incorporaciones. Y no lo ha hecho porque su venta permitiría al Barça rearmarse económicamente para el próximo invierno o afrontar el mercado de fichajes con opciones de incorporar ciertas piezas preciadas que ansían en Can Barça.

Y lo facilita un equipo, el Manchester United, empeñado en hacer una gran incorporación para su punta de ataque aún a costa de tener que vender a ciertas estrellas, como Paul Pogba o incluso Anthony Martial. Y dado que sus dos grandes objetivos se complican: Jadon Sancho se está poniendo muy difícil y Jack Grealish está corriendo la misma suerte ya que su equipo, el Aston Villa, se ha salvado en la Premier League; entonces al United le quedan solo dos opciones, de las cuales una es Ousmane Dembelé, y la otra es el delantero centro de Wolverhampton, Raúl Jiménez.

Entre estos dos futbolistas, bastante diferentes pero que pueden sumar mucho al poderío ofensivo de los red devils, debe salir la gran apuesta del gigante inglés en este mercado veraniego: el United está dispuesto a invertir 65 millones de euros en el extremo francés del FC Barcelona. Ni qué decir tiene que, como decimos, el Barça pondría una alfombra rojo a los inquilinos de Old Trafford si llevan a la ciudad condal esa cantidad.

El problema para el Barça es que Ole Gunnar Solskjaer, entrenador del United, prefiere la incorporación del nueve de los wolves, ya que es un rematador puro y menos un jugador habilidoso de banda, como es El Mosquito. Con todo, los azulgranas están dispuestos a sumar argumentos a su causa introduciendo jugadores en la ecuación, sabedores de que, por ejemplo, Ivan Rakitic ya ha interesado en el pasado a los británicos. Con todo hay otro problema: Dembelé, que guarda silencio, ha de aceptar.