Bartomeu cierra el fichaje que podría salvarle el puesto. Messi da el ok
Hasta ahora no tenía el visto bueno de la plantilla
Josep Bartomeu se las sabe todas. El presidente del Fútbol Club Barcelona ha ideado un plan para mantener el cargo hasta 2021 y evitar que este año haya elecciones anticipadas. No será sencillo pues las cosas en el club blaugrana están peor que nunca, pero el presidente ha cerrado un refuerzo estrella que nadie esperaba.
La situación es tan complicada en parte por la mala relación que tienen Bartomeu y Leo Messi. El poder del argentino en el club es enorme. A estas alturas de la película nadie lo puede negar. Messi acapara los focos cuando el equipo juega, pero también cuando no lo hace. Muchos dentro del club tienen miedo a hablar de la situación, pero llevan advirtiendo desde hace mucho tiempo que “los jugadores son los que tienen el control y lo saben. Bartomeu lo ha filtrado a la prensa y todo se desmadró. Es una guerra”.
Una guerra donde Messi sabe que tiene a compañeros como Luis Suárez a su lado. Jugadores de peso que son los que, al y al cabo, ganan los títulos. Piqué, otra de las voces autorizadas del vestuario, ha ido más a favor del de Rosario que del presidente en los últimos meses. Esto podría ser el punto y final para Bartomeu.
Pero el presidente se resiste. Ha fichado para su junta directiva a Oscar Grau. El que era el director general del club hasta ahora, será el nuevo vicepresidente de Bartomeu. Para muchos es el que lleva la voz cantante en las operaciones, pero está mejor visto por los jugadores y sobre todo por Leo Messi. Tiene un trato cordial con él y eso puede ayudar a suavizar las relaciones.
El argentino ha dado el ok, ya lo sabe el propio presidente, y puede que esto haga que las aguas se calmen, aunque sea de manera momentánea. La vuelta de LaLiga puede suponer que todo se vuelva a descarrilar.
El Barcelona, aunque parece increíble, no quiere volver a reanudar LaLiga. Los motivos no están claros, pues económicamente el club es un solar, pero al parecer Bartomeu tiene un plan, que ha hecho junto al propio Óscar Grau, y el no jugar beneficiaría al club. Los jugadores creen que esto sería darse un tiro en el pie, pero esperan el próximo momento de un presidente que se mueve sobre aguas movedizas y que tiene a cocodrilos esperándole en la orilla. Si sobrevive será para hacerle una película.