El Atlético de Madrid y el Nápoles le tienen a tiro: 40 kilos o a coste 0

Es ahora o nunca. La salida de James Rodríguez no puede, o para ser más exactos, no debiera retrasarse más. El jugador cucuteño ha disfrutado de un tiempo extra en el conjunto blanco como es la presente temporada, ya que en ningún momento fue una petición de Zinedine Zidane. Si James aún sigue entrenando con el equipo blanco (y ahora ni eso) es porque los equipos que se interesaron por él no llegaron a la cifra que Florentino pedía como mínimo: 50 millones de euros.

Ni Nápoles ni Atlético de Madrid pujaron tan fuerte por él y ambos se quedaron sin su mediocentro ofensivo. Los dos conjuntos pensaron que el Madrid terminaría aceptando la cantidad que ellos ofrecían antes que quedarse con James en la plantilla cuando su técnico no contaba con él. Pero Florentino no iba de farol, o llegaban a los 50 kilos o no había trato. El mercado de verano se cerró y con la persiana echada James comenzó la temporada de blanco. Era su última oportunidad para convencer a la parroquia blanca y no quería desaprovecharla.

Sin embargo y pese a un inicio que prometía, una lesión en su rodilla en el mes de noviembre le tuvo fuera de los terrenos dos largos meses. A su vuelta, James no consiguió entrar en varias convocatorias y cuando lo hacía era para ser suplente. El penúltimo tren había pasado y James no había comprado el billete. Y se llegó al momento en el que la temporada entraba en el punto clave, donde el Madrid se jugaba todas las opciones de título, llegó el COVID-19 y con ello, el parón de las competiciones. 

Dadas las vidas que James parece tener en el Real Madrid, no es descartable que si las competiciones se retoman, como parece ser, a finales de mayo o principios de junio, aún le quede una oportunidad más al cafetero para demostrar a Zidane lo que vale. El calendario será apretado y los técnicos tendrán que contar bastante con los suplentes para no sobrecargar a sus titulares en dos meses de mucha intensidad.

Y si finalmente James no acaba entrando en los planes de Zinedine, como venía ocurriendo desde el pasado mes de enero, la esperanza de Florentino Pérez es ahora venderlo por una cantidad cercana a los 40 millones de euros (Manchester United y Everton parecen estar ahora  interesados). Esta vez, el presidente tendrá un handicap a la hora de negociar y es que el colombiano termina contrato en 2021, por lo que si algún club que le quiera, se puede permitir esperar un año, el jugador iría gratis en junio de 2021.