El Bayern cocina a fuego lento la venganza contra el Barça y prepara la oferta por el protegido de Laporta

El Bayern de Múnich está cocinando a fuego lento un nuevo golpe al Barça, a modo de venganza por la sonrojante derrota que sufrieron hace algunas semanas, en la Champions League. Además, en el combinado teutón no ha hecho ni pizca de gracia saber que Joan Laporta ha iniciado los contactos con varias de sus estrellas, que finalizan contrato en el mes de junio, como son los casos de Leroy Sané, Joshua Kimmich y Alphonso Davies. 

Y la cosa no acaba aquí, ya que Hans-Dieter Flick también espera avanzarse a su antiguo club en algunas subastas, y comparten objetivos en común como Jonathan Tah, Florian Wirtz, Benjamin Sesko, Victor Gyökeres, Nico Williams o Alex Baena. De modo que los de Vincent Kompany tienen la intención de tomarse la justicia por su cuenta, y han llamado a una de las grandes promesas que hay actualmente en el Spotify Camp Nou, para convencerle de su desembarco en el Allianz Arena. Nos estamos refiriendo a Noah Darvich.

Aún no ha llegado a debutar con el primer equipo, y ni siquiera ha entrado en ninguna convocatoria, pero fue una apuesta personal del presidente y de Deco, que lo firmaron hace poco más de un año pagando cerca de tres millones de euros al Friburgo. Venía de brillar en el Europeo sub 17, que conquistó con la selección alemana, donde era el capitán y la estrella del equipo. Y están convencidos de que tiene lo necesario para ser un fenómeno de talla mundial.

Por esa razón han estado cuidándolo y protegiéndolo de las críticas, para ayudarle todo lo posible a que tenga una adaptación rápida y sencilla. Y por fin empieza a despuntar en el filial del Barça, en el que ya se ha ganado la titularidad, y ha dejado destellos del increíble potencial que atesora. Laporta no tiene dudas de que más pronto que tarde asomará la cabeza en los planes de ‘Hansi’, y por eso en verano decidió rechazar todas las ofertas de traspaso y de cesión que llegaron por él.

Aunque ahora el Bayern planea llevarse a Darvich, y convencerle de que regrese a su país natal, después de haber intentado su contratación en el pasado.

Un problema, y de los gordos, para Deco…