Deco descarta a Rashford, pero inicia los contactos con otra estrella que quiere salir del Manchester United

El Barça se ha olvidado de Marcus Rashford, un jugador que se ha ofrecido personalmente, y que busca una salida a la desesperada del Manchester United. Con Rubén Amorim ya sabe que no tiene hueco y que tiene las puertas abiertas de par en par para irse, y esto le ha llevado a buscarse un nuevo equipo. Pero tanto Joan Laporta como Deco han considerado que es una operación muy arriesgada, y que no merece la pena intentar su incorporación. 

Aunque Hans-Dieter Flick sí que se ha mostrado seducido con la idea de incorporar a un futbolista de su nivel y de su experiencia, que daría más alternativas para la parcela ofensiva, en la que puede jugar en absolutamente todos los puestos, el presidente y el director deportivo han desechado esta posibilidad. Porque no creen que ahora mismo sea un crack útil, viendo las discretas actuaciones que viene realizando en este curso, y también en el anterior.

Se ha mostrado muy lejos de su mejor versión, y aparte ya tiene 27 años, por lo que no es una joven promesa con margen de proyección. Es cierto que su tasación, de unos 50 millones de euros, es realmente apetecible, pero en el Spotify Camp Nou ya se han encargado de dejarle muy claro que no realizarán ningún intento para llegar a un acuerdo con los ‘diablos rojos’. Y, por ende, tendrá que olvidarse por completo de la opción de llegar a la ciudad condal.

En cambio, hay otra estrella que vive una situación muy similar en Old Trafford que sí que gusta en el Barça. Se trata de Alejandro Garnacho, que estaba siendo una de las principales figuras del cuadro inglés, y se convirtió en indispensable para Erik Ten Hag. Pero el cambio de esquema que ha impuesto Amorim ha hecho que pierda mucho protagonismo, y deje de ser titular, llegando incluso a quedarse fuera en alguna convocatoria. 

La relación con el entrenador portugués está totalmente rota, y ha pedido a su agente que lo saque del United. Laporta y Deco están interesados en el extremo de 20 años, aunque en este caso, su coste puede ser notablemente más elevado que el de Rashford, lo que provoca que no sea un fichaje sencillo.