Se ha convertido en la nueva oveja negra de Flick en el vestuario del Barça

El FC Barcelona ya está planificando la plantilla de la temporada que viene y tiene una hoja de ruta establecida con las posibles bajas en el equipo. Jugadores que no cuentan demasiado para Hansi Flick van a tener que hacer las maletas, ya que el club los va a poner en el mercado para que salgan y conseguir así un beneficio económico para acometer fichajes necesarios.

Uno de ellos es Frenkie de Jong, uno de los futbolistas que se ha convertido en la oveja negra del vestuario azulgrana. El neerlandés no está rindiendo a buen nivel y después de que las negociaciones para la renovación de su contrato no hayan ido a más, el club lo ha puesto en la lista de transferibles y está dispuesto a venderlo si llegase una oferta en condiciones por él.

De Jong, en el mercado

Sin embargo, está por ver qué valor de mercado tendrá el jugador. Joan Laporta espera conseguir entre 50 y 60 millones de euros por un futbolista que no ha logrado cumplir con las expectativas que se tenían de él cuando se le fichó procedente del Ajax. Entre lesiones y bajo rendimiento, De Jong no ha acabado de demostrar todo el potencial que tenía y la entidad culé se ha hartado.

Hansi Flick estaría completamente de acuerdo con la decisión, ya que el neerlandés no entra en los esquemas del técnico alemán. Estuvo dos partidos consecutivos en el banquillo sin ver ni un solo minuto, y ante el modesto Barbastro, en la Copa del Rey, jugó todo el encuentro, pero no destacó para nada comparado con algunos otros de sus compañeros en el centro del campo, como Pablo Torre o Pedri.

El problema, su salario

De Jong tiene contrato hasta el 30 de junio de 2026, por lo que si no acaba renovando, el Barça lo tendrá que vender el próximo verano para evitar que se marche gratis el año que viene. Aun así, uno de los principales problemas es su salario, de los más altos de la plantilla, e incluso en la Premier League sería complicado que le pudieran dar esa cantidad de dinero. Los azulgranas aún tienen la esperanza de encontrar a un equipo desesperado que acabe pagando por sus servicios en los próximos meses.