Pep Guardiola hace el regalo de Navidad al Barça: "Lo necesitáis"

Una oportunidad inesperada aparece en medio de las urgencias defensivas

El FC Barcelona vuelve a mirar al mercado con urgencia. La defensa, una de las zonas más castigadas de la plantilla, se ha convertido en una prioridad absoluta tras la lesión de Andreas Christensen. El contratiempo ha dejado al descubierto una realidad incómoda: el Barça va justo de efectivos atrás y necesita soluciones inmediatas si quiere competir con garantías en el tramo decisivo de la temporada.

Guardiola señala una solución desde Manchester

En ese contexto aparece una figura muy conocida en Barcelona: Pep Guardiola. El técnico del Manchester City tiene en su plantilla a un jugador que no está gozando del protagonismo esperado y que encajaría como anillo al dedo en el Barça. Se trata de Nathan Aké, internacional neerlandés, fiable, polivalente y con experiencia al máximo nivel.

Aké puede actuar como central zurdo o incluso como lateral, una versatilidad muy valorada por el cuerpo técnico azulgrana. Además, conoce bien el fútbol de posesión, la salida limpia desde atrás y los automatismos defensivos que exige un equipo como el Barça. Desde el entorno del jugador se reconoce que busca más minutos y continuidad, algo clave de cara al próximo Mundial, donde quiere ser titular indiscutible con la selección que dirige Ronald Koeman.

No es casualidad que su nombre haya aparecido con fuerza en los últimos días. Guardiola sabe que el Barça necesita refuerzos atrás y también es consciente de que Aké podría relanzar su carrera en un contexto donde tendría más protagonismo. De ahí que, en clave casi simbólica, se hable de “regalo de Navidad”.

Una operación compleja, pero con sentido deportivo

Eso sí, la operación no es sencilla. El Manchester City no contempla una salida fácil y preferiría incluir a Aké dentro de alguna operación de compra, más que dejarlo salir en condiciones favorables. Además, el central cuenta con ofertas importantes dentro de la Premier League, lo que eleva la competencia y complica el margen de maniobra del Barça.

Aun así, en los despachos azulgranas no descartan nada. El nombre de Aké está encima de la mesa porque encaja en lo deportivo y en lo estratégico. Aporta experiencia, equilibrio y una fiabilidad inmediata que hoy el equipo necesita como el comer. La dificultad está en cuadrar números y convencer al City.

El Barça sabe que no puede permitirse improvisar en defensa. Y Guardiola, desde la distancia, parece tener claro el mensaje: el jugador existe, el perfil encaja… y la necesidad es evidente. Ahora, la pelota está en el tejado de la dirección deportiva azulgrana.