La vida nocturna de Lamine Yamal es un problema, noches enteras sin dormir

Hansi Flick teme que Lamine no se centre en su estado de forma

En can Barça no acaban de estar completamente tranquilos respecto al estilo de vida que lleva Lamine Yamal. La gran estrella culé ha demostrado estar muy alejada del perfil bajo que siempre había llevado Leo Messi y que tanto éxito le dio en el conjunto blaugrana. La forma de entender la vida de Lamine es radicalmente opuesta. Al joven español le encanta exponerse en redes sociales y las cámaras no le generan ningún miedo. De hecho, parece que le gusta ser el centro de atención y que, lejos de esconderse, trata de mostrarse cada vez más.

Esta faceta es mucho más parecida a la que tenía Neymar que a la de Messi. Una comparación que duele mucho en can Barça, donde hay cierto temor de que Lamine acabe perdiendo el control de su vida y se centre demasiado en lo que pasa fuera del terreno de juego, olvidando su crecimiento futbolístico. Y es que, entre campañas publicitarias, interacciones en Instagram y una vida nocturna lejos de ser la ideal, Lamine no sigue al pie de la letra las indicaciones de su equipo técnico.

Lamine pasa muchas noches en vela

La realidad es que la fiesta no es uno de los grandes problemas de Lamine Yamal. El joven, como muchos de su edad, disfruta de la vida nocturna cuando puede salir, pero sin excesos. Y eso no es algo que preocupe tanto a Hansi Flick ni a la directiva del Barça. Creen que su rechazo a la bebida es una buena señal y que le ayudará a no desviarse demasiado. Sin embargo, es su afición a los videojuegos lo que más inquieta.

Y es que, con la salida de un famoso videojuego de fútbol, cuentan que Lamine Yamal está completamente enganchado. Se ha pasado media vida jugando y, con la llegada de la nueva edición, dedica largas horas de la noche a jugar, sacrificando el descanso necesario para un deportista de élite.

Así pues, esta vida nocturna es la que no acaba de gustar a Hansi Flick, que considera que la pasión de Lamine por la consola podría acabar afectando negativamente a su rendimiento. Algo muy similar a lo que en su día le ocurría a Dembélé.