La oveja negra de Flick en el vestuario del Barça, tiene mala fama, Joan Laporta lleva 1 año queriéndolo echar

El Barça está harto de su actitud y tiene los días contados en el club: no será renovado y tiene la puerta abierta

Frenkie de Jong tiene los días contados en el Barça. El centrocampista neerlandés, que acaba de volver a jugar después de meses lesionado por un problema en el tobillo, acumula varios comentarios y actitudes que han molestado mucho en el club, especialmente a Joan Laporta.

El jugador sabe que el Barça intentó traspasarle hace dos veranos, cuando se le persuadió para que aceptara una oferta del Manchester United, a lo que se añadieron unos rumores sobre su salario, a los que el propio jugador respondió, con virulencia, en la previa de un partido de la Champions League contra el Nápoles.

De Jong se niega a renovar a la baja

El Barça decidió hacer borrón y cuenta nueva y le hizo una oferta de renovación a De Jong, a la baja, pero la respuesta del jugador fue negativa. El neerlandés no piensa renunciar a su salario, un gesto que ha acabado de hartar al Barça, que ya le ha puesto la cruz definitiva. Hansi Flick quiere disponer de De Jong y lo está demostrando, dándole minutos, aunque es consciente de los problemas que tiene el club con el jugador, por lo que entenderá que, terminada la temporada, el Barça decida ponerlo en el mercado.

En el Barça, además, creen que es bueno que De Jong juegue, ya que una buena actuación puede augmentar su valor en el mercado y provocar que más clubes importantes acepten poner grandes cantidades de dinero para sacarlo de Barcelona. La idea, pues, es que la temporada avance por el camino de la normalidad, para tomar la decisión en el próximo verano.

De Jong y su negativa a operarse

A todo ello se añade que en el club saben que el tobillo de De Jong no está del todo bien y que las lesiones constantes acompañarán al centrocampista en lo que le queda de carrera. El Barça entiende que este es otro motivo más para apostar por su salida, sobre todo si el jugador, como ya demostró en verano, se sigue negando a pasar por el quirófano para buscar una solución.

Este choque de opiniones sobre la necesidad de pasar por el quirófano fue la gota que colmó el vaso, ya que en el Barça creen que el jugador, por enésima vez, miró solo por sus intereses, alargando un tiempo de baja que podría haber sido mucho más corto.