La decisión de Hansi Flick es firme: no está capacitado para jugar en el Barça

El primer tiempo de Casadó ante el Olympiacos fue muy malo

A pesar del resultado, el Barça no acabó de encontrar las mejores sensaciones en un partido propicio para ello como lo era el duelo de Champions contra el Olympiacos. El equipo de Hansi Flick jugó unos primeros minutos realmente flojos e impropios del equipo que fue la pasada temporada. Ni había control ni una demostración de grandes dotes ofensivas ni nada por el estilo. Fue un Barça bajo mínimos, muy limitado por su falta de capacidades con el balón en los pies y que gracias a los goles evitó que se generaran los primeros pitos en Montjuïc, donde hay cierta preocupación.

En este sentido, uno de los jugadores indicados para llevar a cabo las labores de conservación de balón y de distribución no era otro que Marc Casadó. El canterano se ha criado en el estilo de juego del equipo y debe entender perfectamente lo que necesita el conjunto para mantener la posesión. Sin embargo, con lo visto en la primera parte ante el conjunto griego, se hizo patente que Frenkie De Jong es un jugador más que necesario para el bien del Barcelona.

Flick considera que ya no tiene el nivel

Parece que lo mostrado por Casadó en la pasada temporada fue una especie de espejismo. El mediocentro catalán no es el mismo que demostró ser el año anterior. Ni genera la solidez defensiva que se espera de él ni aporta lo suficiente con el balón en los pies. Se ha convertido en un vacío que hace mucho daño al Barça y, si se pone a perder balones como hizo ante el Olympiacos, el daño es todavía peor.

Todo esto ha llevado a Flick a tomar una decisión muy firme con respecto a Marc Casadó, al que ve cada vez menos capacitado para jugar en el máximo nivel. Cuando las cosas aprietan y debe ir a máxima velocidad, a Casadó se le ven las costuras y eso no gusta nada a Flick, que sabe que no puede acabar de confiar en él ni siquiera en los partidos menos complicados.

Así pues, todo apunta a que Flick y el Barça se verán obligados a tomar una dura decisión con un Marc Casadó que ha bajado sustancialmente el nivel en esta segunda temporada como jugador de pleno derecho del primer equipo del FC Barcelona.