Joan Laporta se lo ha estado ocultando a Hansi Flick y ahora el enfado es monumental, relación rota
A Hansi Flick no le gusta nada que jueguen con su planificación.
Si hay algo sagrado para Hansi Flick, eso es la transparencia y la sinceridad. Al entrenador del Barça no le gusta nada que no se le cuenten todas las cosas que pasan en el día a día del club. Considera que merece el respeto de la directiva y que no se puede trabajar bien si él no es consciente de lo que pasa y deja de pasar en el entorno del Barça. Algo que siempre había pasado hasta ahora. Y es que Joan Laporta no ha sido nada transparente en lo que respecta a la salida de Íñigo Martínez, siendo una noticia que nadie se esperaba y de la que Hansi Flick tampoco estaba al tanto.
La realidad es que el técnico germano nunca ha puesto pegas a ninguna de las decisiones del club. Por muy duras que puedan ser o que vayan en contra de algunos de los intereses de Flick, él siempre ha apoyado al club. Es por este motivo que le ha dolido todavía más. Hansi cree que no merecía que se lo ocultaran. Además, ahora deberá comenzar a planificar de nuevo todo el entramado defensivo del equipo, ya que han dejado que salga gratis uno de los pilares defensivos del Barça.
Flick no sabía nada y ahora el enfado es importante.
Ante la salida de Íñigo Martínez, tema del cual el club ya estaba enterado desde hace varios días, ni Joan Laporta ni Deco se dignaron a hablar con Flick. Eran conscientes de que el entrenador no iba a autorizar la venta de su jugador más importante en defensa, todavía más si lo hacía a cambio de 0 euros y sin garantizar ninguna incorporación. Una serie de condicionantes que llevaron a la directiva del Barcelona a no hablar con Flick sobre nada. Algo que molestó profundamente al entrenador.
Ahora la situación es todavía peor. Flick debe hacer frente a una baja sumamente dolorosa como lo es la de Íñigo Martínez, un jugador que se había convertido en la clave del éxito defensivo del equipo y que ahora ya no va a estar, dejando solo a Pau Cubarsí y obligando a Flick, que está muy enfadado, a buscar una alternativa entre lo que ya tiene.
Así pues, en Can Barça hay dos problemas ahora: primero, asumir y sobrellevar la baja tan importante que ha supuesto el adiós de Íñigo Martínez y, también, tratar de calmar a un Hansi Flick al que no le contaron nada y que ahora se siente muy dolido con el club.