Ferran Torres tiene un problema personal grave que le cierra las puertas

A pesar de que no es titular indiscutible bajo las órdenes de Hansi Flick, Ferran Torres está haciendo una gran temporada en el FC Barcelona. El valenciano empieza los partidos desde el banquillo, teniendo en cuenta que no puede luchar por la titularidad con Robert Lewandowski, Raphinha y Lamine Yamal delante. Aun así, el atacante está aprovechando las oportunidades que le está dando el técnico alemán.

Suele entrar de suplente al terreno de juego, pero se ha convertido en un revulsivo muy valioso para Flick gracias a su acierto de cara a portería. Es un perfil distinto al de Lewandowski, más vertical y móvil, algo que ha cazado a la perfección con el estilo del míster. En los 32 encuentros que ha jugado esta temporada, el valenciano ha marcado un total de 13 goles y ha dado tres asistencias, unos números importantes para no ser titular.

El PSG descarta el fichaje de Ferran Torres

Eso le ha hecho generar interés de otros equipos, que se habrían interesado por sus servicios. Uno de los que más lo había hecho había sido el PSG, ya que Luis Enrique había pedido el fichaje de Ferran a Nasser Al-Khelaïfi. Sin embargo, los problemas personales que tuvo el jugador con la hija del entrenador asturiano habrían descartado finalmente la operación, por lo que los parisinos ya no estarían interesados en él.

Para el técnico del conjunto francés, el atacante era una pieza fundamental para su delantera por la versatilidad y polivalencia que tiene Ferran, ya que le permite ser una alternativa en cualquiera de las tres posiciones de ataque, algo que pocos delanteros tengan en el mercado y que puedan realizarlo prácticamente a la perfección sobre el campo. Por eso, estaba en la lista de objetivos, pero ahora la situación habría cambiado.

El valenciano quiere quedarse en el Barça

Por otra parte, el Barça tiene claro que Ferran es un activo importante si sigue a este nivel y ya está pensando en renovar al futbolista. Además, el delantero tampoco tiene ninguna intención de abandonar el club azulgrana, ya que tuvo varias ocasiones de hacerlo en los dos últimos veranos, pero finalmente se quedó en Barcelona trabajando para tener una buena oportunidad que le está llegando ahora.