El relevo de Lewandowski ya está decidido: en el Barça lo tienen claro

El club ya trabaja en silencio mientras observa con lupa el mercado y el momento adecuado para dar el paso

El futuro de Robert Lewandowski en el FC Barcelona empieza a generar más preguntas que respuestas. A pesar de que el delantero polaco sigue siendo una referencia ofensiva, en los despachos del club asumen que el tiempo no pasa en vano. Su continuidad no está en duda a corto plazo, pero sí el rol que ocupará en los próximos años. El Barça sabe que debe anticiparse y evitar llegar tarde a una transición clave.

La planificación deportiva ya no gira solo en torno al presente. El club trabaja con escenarios a medio plazo y uno de ellos contempla un relevo progresivo en la delantera. Lewandowski ha sostenido al equipo en momentos complejos, pero el desgaste físico, la exigencia del calendario y la necesidad de renovar energías obligan a mirar más allá. En ese contexto aparece un nombre que gana peso con el paso de los meses y que encaja con la idea de futuro que maneja la entidad azulgrana.

Etta Eyong, una apuesta estratégica que vuelve a escena

Etta Eyong se ha consolidado como uno de los perfiles mejor valorados por la dirección deportiva del Barça. El delantero camerunés ya estuvo en la agenda azulgrana en el pasado, pero las limitaciones del límite salarial frenaron una operación que entonces parecía bien encaminada. Hoy el escenario es distinto, aunque el interés sigue intacto y, de hecho, reforzado por su evolución.

La Copa de África ha sido el gran escaparate. Eyong no solo ha marcado goles decisivos, sino que ha demostrado personalidad, carácter competitivo y una naturalidad impropia de un jugador tan joven. En el club destacan su capacidad para aparecer cuando el partido lo exige, algo que no se entrena y que marca diferencias en los grandes escenarios. No es solo cuestión de cifras, sino de mentalidad.

Su paso por Levante UD también juega a su favor. Esa etapa le permitió adaptarse al fútbol español, entender los ritmos de LaLiga y competir ante defensas exigentes. Para el Barça, ese aprendizaje previo reduce riesgos y acelera posibles procesos de adaptación. Eyong no llegaría como una incógnita total, sino como un delantero con recorrido y conocimiento del contexto.

En los análisis internos, el camerunés destaca por su potencia física, su movilidad y su olfato dentro del área. No es un delantero estático ni dependiente del juego directo. Trabaja sin balón, ataca espacios y tiene margen de mejora, un factor clave para un club que busca construir más que comprar soluciones cerradas.