Fue víctima de Lamine Yamal, pero De la Fuente corrige: llamada de emergencia al protegido de Lucho

En las oficinas del Camp Nou están encantados con el desempeño de varios de sus futbolistas en este arranque de curso. Especialmente con algunos nombres que venían dejando dudas muy serias desde la pasada temporada. En este sentido, Ferran Torres es uno de los más destacados, pues el tiburón ha pasado de ser irrelevante a ya sumar dos tantos en lo que va de curso y a contar con una confianza en él mismo que hacía mucho tiempo que no mostraba.

Camino al 11 de Xavi y a por De la Fuente

Ferran Torres ha tenido que partir de cero esta temporada, el ex del Manchester City se abonó a un verano donde solamente entendía la palabra trabajo para pasar de ser el último delantero en el orden de Xavi, a ser un jugador de cada vez, mayor peso en el Barça, hasta el punto de ser, junto a Lamine Yamal, el delantero más en forma del equipo.

Con este cúmulo de situaciones, el español espera ser capaz de dar el salto a la titularidad del Barça lo antes posible, algo que lo propulsaría de vuelta a la selección, donde tras la destitución de Luis Enrique, no ha vuelto a enfundarse la elástica de la selección española, pues Luís de la Fuente no lo ha considerado merecedor de ser tomado en cuenta hasta que las lesiones de Marco Asensio y Dani Olmo han obligado al seleccionador traer de vuelta al culé.

Lamine Yamal, su mayor obstáculo en 'can Barça'

El mayor problema para Ferran, es que su momento de máxima ilusión ya ha pasado. El español es un jugador ya visto y es aquí donde es más complicado que tenga más oportunidades que un Lamine Yamal que, por su juventud y descaro, se ha ganado el corazón de los aficionados. Además, no hace falta decir que el talento del canterano culé es muy superior al de un Ferran, que, para nada es un mal jugador, pero que jamás tendrá unas cualidades parecidas a las de Yamal, que es un jugador generacional.

Afortunadamente para ambos, Ferran y Lamine son jugadores compatibles, pues ambos ofrecen cosas muy distintas a sus entrenadores, pudiendo jugar en posiciones distintas. Sin embargo, para que jueguen juntos en el Barça, Xavi deberá ser todavía más drástico, y sentar a Robert Lewandowski, un gesto que podría desencadenar un conflicto brutal en el conjunto blaugrana.