Deschamps, acorralado y Benzema espera ya a Zidane: habrá cambio total

Cuando se gana importa mucho menos el cómo se hace, parece que se diluye el error en el éxito. El problema viene cuando se pierde, que se ven las costuras y saltan por los aires las aristas; es ahí cuando se hunden los defensores y brotan los críticos, siendo escuchadas solo estas voces y creando un ruido ensordecedor. Con Didier Deschamps en Francia ocurre eso: el equipo juega un fútbol impropio de su calidad, y ahora que ha caído en la final del Mundial de Qatar se busca su cabeza, algo de lo que, en cierta forma, se alegran Benzema y Zinedine Zidane.

La ruptura total entre el míster de Francia y el delantero del Real Madrid es tan evidente que no hace falta ni matizarla. Directamente, no se aguantan y si se han soportado ha sido por la presión mediática y hasta política. Ahora, con Francia besando la lona en la final mundialista, en la que solo compareció gracias a un gigante Kylian Mbappé, en la Federación Francesa de Fútbol todas las cabezas miran a Deschamps… y a Zizou: el responsable de la caída y el posible sustituto que arregle el estropicio.

Desde Francia, no se asegura que Deschamps vaya a ser destituido, pero se deja caer, lo cual es poco menos que colocarlo en la rampa de salida. Y por supuesto Zidane aparece por encima del resto de candidatos. Y si Zizou llega al banquillo francés, el más alegre será un Benzema que tiene una fantástica relación con su exentrenador. Dicho de otra forma, Deschamps, que ha sido dura y, a buen seguro, justamente criticado por su juego para tanta estrella de la que dispone, pasa por sus últimos momentos al frente de Francia y Zidane es el recambio perfecto; aunque con él, mucho cambiará en les bleus.

Zidane ha demostrado ser un entrenador que cree más en la fiereza y entereza defensiva que en grandes alardes combinatorios, lo cual casa bastante con la idea del mismo Deschamps, sin embargo a Zidane no se le busca en Francia tanto por su idea de juego, sino por su gestión de egos. Ahí es donde el ex Real Madrid ha demostrado ser un genio, lidiando con jugadores de la talla de Cristiano Ronaldo o el mismo Gareth Bale. Con manga ancha en Francia, mucho cambiará, pasando por Benzema, que con Zizou será indiscutible y si eso molesta a alguien en el vestuario galo, ya saben dónde está la puerta. Ni que decir tiene que si Zidane, y por ende Benzema, llegan al Francia, las convocatorias van a cambiar mucho.