Xavi acaba de confirmar que se queda y el culé está atónito: el intento de Unai Emery es rechazado

El mismo Fabrizio Romano reconoce el interés, pero también la negativa

La confirmación de que Xavi Hernández se queda en el FC Barcelona ha sido recibida con cierto estupor por la masa culé, más que nada porque el crédito dado por la entidad al entrenador parece excesivo y porque puede venir más por una imposibilidad del club en conseguir un recambio de garantías que en una verdadera confianza absoluta en el trabajo del míster. Sea como fuere, este hecho ya no tiene marcha atrás, como la negativa del club a este intento de Unai Emery.

Uno de los nombres calientes

Uno de los asuntos que más están en boga en el Barça es la forma en que tratará de recaudar dinero para liberar masa salarial y afrontar uno o dos fichajes que Xavi ya ha pedido y que muy probablemente el equipo necesita de cara a la campaña 24/25, y está claro que entre estas estrategias, alguna venta masiva está en el epicentro de esta cobertura, siendo Frenkie de Jong, Ronald Araujo, Raphinha o Jules Koundé los nombres que más dinero pueden dejar en caja.

Pero una cosa es que el Barça se plantee vender a alguna de estas piezas y otra muy distinta es que lo vaya a hacer por una cantidad que no sea absolutamente irrechazable. Y en este caso, no ha sido así. El Aston Villa habría lanzado una tentativa para llevarse a Jules Koundé y esta habría sido rechazada con rotundidad por parte del Barça, al parecer por no acercarse a las expectativas de la entidad catalana.

Al respecto, Fabrizio Romano era claro, advirtiendo a los hinchas de Villa Park: “me temo que no tengo nada que informar aquí y todo parece tranquilo sobre Koundé por ahora. El Barcelona sigue contento con él y haría falta una propuesta importante, realmente importante, para tentar al club a venderlo. Hasta el momento no ha sucedido nada y no tengo confirmación sobre esta historia”. Si el intento ha existido o no, no lo sabemos, pero sí que el Barça es taxativo al respecto: para que ocurra han de sorprenderlos con la propuesta, que no es el caso, y menos de un hipotético rival en Champions League.