Tortazo mayúsculo de Neymar a Al-Khelaïfi y Mbappé que deja perplejo a Messi: 'no perdona un euro'

Neymar Júnior, para bien o para mal, es uno de los elementos dinamizadores de este Paris Saint-Germain. Con él empezó esta nueva etapa de ataque a la Champions League, que aún no ha obtenido premio y que, de hecho, amenaza con nuevo fracaso. Precisamente por eso es el objeto de todas las críticas, entre otros deslices que otorgan gasolina a sus detractores, y por eso está siempre en el punto de mira, pero Nasser Al-Khelaïfi una vez más se deberá tragar sus palabras con el 10, asunto que toca de cerca a Leo Messi.

Porque el argentino fue primeramente expreso deseo del brasileño, que lo quería en sus filas, pero a efectos de la Liga de Campeones y en lo que respecta exclusivamente al PSG ni uno ni otro, menos aún el 10 de la albiceleste, han aportado como dúo resultados halagüeños. De ahí que estén discutidos, de ahí que el PSG, también Messi, se piensen la renovación del argentino. De ahí que el PSG trate de colocar a Neymar en la Premier League en el mercado de fichajes. Sin embargo esto no vaya a suceder.

Informa L’Equipe que el jugador nacido ya hace 31 años en Mogi das Cruzes no tiene intención de salir de la capital de Francia, es más, está únicamente concentrado en llegar a la cita del 8 de marzo ante el Bayern de Múnich tras la lesión sufrida en su tobillo en el último partido de la Ligue 1, ante el Lille. Parece que llegará, aunque justo. Y aún con todo, la información va más allá y choca con las dudas de Al-Khelaïfi y el PSG, también las de Messi: Neymar se va a quedar, le pese a quien le pese.

El medio de comunicación francés informa que quiere arriesgar para estar en el Allianz pero no lo hará si eso compromete su futuro, que en el caso del 10 de Brasil puede llevarle a estar en el Parque de los Príncipes hasta 2027. Con contrato hasta 2025 pero con la posibilidad para el jugador de extenderlo una campaña más, Neymar tiene amarrado su futuro y no lo va a soltar. Controvertido, polémico, de cristal, etcétera, y a la vez genial técnicamente, mágico y otro largo etcétera, como decimos, para bien o para mal esto es Neymar, y el PSG sabía lo que firmaba. Neymar confía en toca la cima en París, todavía lo hace, y eso desconcierta por su intermitencia; ahora, tiene contrato... Ni que decir tiene que Mbappé, que no quiere a ninguno de los dos en el proyecto y acaba contrato antes que el brasileño, no está contento.