Sin Hazard, locura de Zidane ante el City ¡Lo nunca visto!

Zinedine Zidane necesita un cambio en su equipo que modifique esta mala racha (no gana desde el 9 de febrero y ha perdido dos de los últimos cuatro duelos) y le dé un empujón extra a su equipo de cara a los dos compromisos que tiene por delante esta semana: uno, el que debería haber sido el más importante, el duelo ante el Manchester City; el otro, que era el segundo en prioridad, ante el Barça, ahora pasa a ser decisivo también. La situación, se mire por donde se mire, es crítica para Zidane. Si pierden contra el City estarán casi fuera de la Liga de Campeones; si lo hacen contra el Barça, en el Bernabéu, sería la puntilla a LaLiga. El míster francés minimizaba en rueda de prensa la situación, pero planea algo nuevo frente al abismo que asoma.

Y es porque, de una forma u otra, la única forma de empezar a ganar al Barcelona es hacerlo este miércoles ante el Manchester City. El Madrid no puede permitirse ceder en octavos de final un año más, pero si las sensaciones hablaran por dinámicas, la blanca sería francamente preocupante. El Madrid no tiene gol porque si Benzema no las mete, como le ha ocurrido en tantas ocasiones en su trayectoria, no hay quien lo haga ¿O sí?

Y esa es la variante táctica que plena Zidane frente a los skyblues, una revolución de las de antes. Un 4-4-2 puro, al uso, donde Luka Jovic haga de referencia en la punta de ataque y Karim Benzema ejerza de segundo delantero, que es lo que es, justo por detrás, moviéndose entre líneas. El serbio no ha tenido continuidad esta temporada pero Zidane, con la ausencia para lo que resta de campeonato (al menos en los próximos dos meses) de Eden Hazard, debe elegir entre el 18, Vinicius Junior o Gareth Bale.

Es posible que ante el Barça sí ponga de inicio al galés o al brasileño, pero la opción Jovic la sopesa frente al cuadro de Guardiola, un equipo más físico. Jovic cuenta con olfato y es capaz de generar segundas jugadas, de las que podría beneficiarse el francés, así como la oleada que venga de segunda línea, con Fede Valverde y Luka Modric (previsiblemente, ya que Isco ha vuelto a bajar sus prestaciones) como puntas de lanza. Zidane cree tener antídoto anti City: 4-4-2.