Pogba no es el único: Griezmann, Bale y Lukaku también se arrepienten

En el fútbol el arrepentimiento es un sentimiento muy habitual que entra en la cabeza de los jugadores o de los entrenadores. Surge, sobre todo, a la hora de tomar decisiones que implican un traspaso o un cambio de equipo en el que había unas expectativas demasiado altas que después terminan marchitándose y quedándose por los suelos. La ilusión se convierte en una decepción desmedida y ese futbolista o técnico de turno acaba echando de menos su lugar de origen, en el que triunfó y fue muy querido.

Por eso, en Don Balón repasamos algunos de esos futbolistas que se están mostrando arrepentidos en este mercado de fichajes o que lo han hecho hace no mucho tiempo ya que regresaron a sus clubes anteriores. Uno de los casos más llamativos de este verano es el de Paul Pogba. El centrocampista brilló hace años en la Juventus y se convirtió en uno de los mejores centrocampistas del mundo (si no llegó a ser el mejor) y eso le valió su fichaje por el Manchester United. El francés quiso probar suerte en un club histórico y en una competición como la Premier League pero lo cierto es que nunca ha llegado a tener un nivel tan alto como el que mostró en la Juve, lugar donde quiere ahora volver.

Gareth Bale también demostró que nunca es tarde para regresar. En el Tottenham deslumbró al mundo jugando como lateral izquierdo y por eso el Real Madrid se gastó una millonada en él. Reconvirtió su posición en el campo jugando como merengue pero las lesiones y su pasotismo le lastraron hasta el punto de que quiso probar una segunda oportunidad con los Spurs en calidad de cedido. 

Otro que está de actualidad es Romelu Lukaku. En el Inter de Milán se convirtió en la pesadilla de cualquier defensa y masacraba a todo lo que se le ponía por delante, por eso le fichó el Chelsea echando el resto por él. Sin embargo, sus problemas extradeportivos y su mala relación con Tuchel hacen que ahora el delantero quiera regresar desesperadamente al Inter.

Por último, Griezmann es otro de esos casos recientes de arrepentimiento. Tras su marcha al Barcelona dejando en la estacada al Atlético de Madrid y a la afición colchonera de uñas, no llegó a cuajar en el Camp Nou y la pasada volvió a vestir de rojiblanco en calidad de cedido para demostrar que su mejor rendimiento lo ofrece como atlético.