Ni Sergio Ramos ni Nacho: el estandarte del Real Madrid es extranjero; Stuttgart, examen aprobado

Defensor sacó cara por el equipo en Champions.

Es todo un sacrificio para los jugadores de alta competencia llegar a estar muchos años en un club, no solo basta la dedicación o la lealtad hacia una institución, debe haber un valor agregado notorio para que seguir hasta de titular. Real Madrid es un lugar considerado como el sueño de todo futbolista, sobre todo si se es hincha de la Casa Blanca. Después están figuras como Raúl Blanco, Iker Casillas y el vigente Luka Modric, modelos que todo alevín quiere copiar.

Por otro lado, están los tipos rudos como Antonio Rüdiger, dispuestos a dejar todo en la cancha y a pesar de las dolencias, continuar intentando hasta que el cuerpo lo permita. Estas características rodean al zaguero alemán, que hace poco se confesó sobre la importancia de darlo todo en el terreno de juego, dejando en claro que este indicativo genera la confianza de Carlo Ancelotti. En la Champions ya marcó la diferencia y su objetivo es seguir haciendo historia con el club.

El sacrificio de Rüdiger

Antonio Rüdiger salió de Chelsea para poner rumbo al Madrid, equipo con el que conquistó más títulos de los que pudo pensar tener. Su vigencia en el cuadro merengue es un mérito que le propio jugador ha cosechado. Con Carlo Ancelotti a la cabeza, el germano mostró su mejor versión, y en esta Champions, no está siendo la excepción. “Aunque tenga que jugar en el Real Madrid con una sola pierna, lo haré”, comentó el alemán.

Símbolo del Madrid

El debut en Champions de los galácticos concluyó en una victoria sobre Stuttgart, y a pesar de los aspectos negativos en la defensa, Rüdiger evitó que se la zaga pagara los platos rotos. El internacional con Alemania aclaró que su compromiso es intachable, así como su dedicación a la hora de afrontar un duelo de relevancia. “Es un honor jugar en este club”, enfatizó.

El estandarte de la defensa

La salida de Nacho Fernández trajo una serie de complicaciones en la defensa, se lesionó Jesús Vallejo, aún no se recupera David Alaba y Éder Militao sigue sin regresar. La pronta solución fue Dani Carvajal, pero quien no se movió de su posición fue Antonio Rüdiger, resistente hasta el final y con la mira intacta en su siguiente objetivo.