Ni Real Madrid ni Barça se han atrevido a hacer algo así

Hace tan solo unos días que se ha hecho oficial: el Club Brujas belga pagará su nuevo y flamante estadio gracias a su inminente salida a bolsa. No es el primer equipo en el continente europeo que lo llevará a cabo, pero sí el pionero en Bélgica. Sus números son muy buenos, como demuestra el balance del año 2020, cuando en plena pandemia el club cerró el ejercicio con unos beneficios netos de algo más de 24 millones de euros.

Aún así, el coste del nuevo estadio está presupuestado en torno a los 100 millones de euros y esa cantidad sería inviable de alcanzar en pocos años sin la ayuda de la capitalización bursátil. Antes que el Brujas, ese paso lo dieron equipos como el Ajax de Amsterdam, el Borussia Dortmund, el Manchester United o el Benfica portugués con resultados muy dispares: el Ajax ha logrado duplicar el valor de sus acciones en la última década, mientras que las del Borussia se han devaluado hasta valer la mitad que hace 20 años, cuando el club salió a bolsa.

La intención del Brujas es poder costear su nuevo estadio con esta acción y, por ello, ya han avisado al banco Belfius de que se llevará a cabo en los próximos meses. Su estadio actual, el Jan Breydel, fue construido a mediados de los 70, la década mágica para el equipo belga, pues fue en esos años cuando llegó a una final de la UEFA (1976) y a una final de la entonces Liga de Campeones (1978).

Aunque se remodeló a finales de los años 90 para que albergase una de las sedes de la Eurocopa del año 2000, (allí falló Raúl aquel histórico penalti contra la Francia de Zidane, Barthez y compañía) las instalaciones están ya obsoletas y la intención de Bart Verhague (presidente y accionista mayoritario) es mudarse a una nueva localización en los próximos años, con una instalación acorde al siglo XXI.

La solución que han decidido en el club de la capital belga aún no se ha atrevido nadie en España a llevarla a cabo. Ni Barcelona, ni Real Madrid, ni Atlético de Madrid ni ningún otro equipo ha dado el paso de salir a cotizar a bolsa a pesar de que fue una toda una tendencia a comienzos del siglo XXI. Los requisitos para entrar en este coto tan cerrado son muy exigentes y eso ha impedido que por el momento ningún club español lo haga realidad.