El mago Zidane la vuelve a liar en octavos: tres caras nuevas en Manchester

A nadie entre la parroquia blanca que estuvo en el Santiago Bernabéu esa noche fría del pasado 26 de febrero, en la que el Real Madrid perdió 1-2 ante el Manchester City en la ida de octavos de final de la Liga de Campeones, le gustó lo que vio sobre el césped y mucho menos el resultado final derivado de esa mala imagen. Pero ahora Zinedine Zidane, el mago de la Champions League, se saca tres caras nuevas para el Etihad Stadium que pueden ser cruciales.

Una de las más polémicas decisiones del míster francés no solo de aquel partido de Champions sino de toda la temporada (ya que hay choques, como aquel ante el City, que pueden marcar temporadas) fue dejar en el banquillo y sin jugar un minuto al motor creativo del equipo: Toni Kroos. El futbolista alemán, indiscutible siempre y por necesidad, no jugó entonces, pero será una de las nuevas caras en el once merengue en el partido de vuelta. Y no será la única.

Zizou, que nunca ha perdido una ronda de Liga de Campeones como entrenador, está decidido a dar un vuelco a la eliminatoria tornando el resultado que lleva en contra el Madrid y a través de nuevos protagonistas. Uno, como decimos, será Kroos, y los otros dos son los dos grandes a la vez esperados y ausentes de la temporada: Marco Asensio y Eden Hazard. Cierto es que el mallorquín está todavía tomando velocidad de crucero y que el belga parece incluso lejos de conseguirla, pero hay un hecho que para Zizou es crucial con ellos.

Y es que 'a grandes partidos, grandes jugadores'. Esta máxima la tiene grabada a fuego el que fuera uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol y que hoy es entrenador del Real Madrid. Sabe que a Marco Asensio le queda recorrido para estar en su máximo nivel y conoce de las dificultades físicas y mentales de Hazard esta temporada, y sin embargo confía en que a un partido, en un solo envite, la calidad y personalidad de ambos sean decisivas. Como la del 8 del Madrid. Kroos, Asensio y Hazard, unidos a Vinícius Júnior y Karim Benzema, deben lograr el imposible: ganar en el Etihad marcando al menos dos goles.