Laporta al fin lo logra: Haaland y Bernardo Silva llegan al Camp Nou

El público del Camp Nou soñaba, a principios de verano y como consecuencia de todos los rumores que estaban surgiendo en torno a él, con ver a Haaland jugando esta temporada con el Barça vestido de azulgrana. Ahora la rumorología ha cambiado y también el punto de fijación de Joan Laporta y a quién anhela el aficionado culé es a Bernardo Silva. Ahora, el sueño de todos los hinchas del Barcelona se van a hacer realidad… aunque a medias, porque efectivamente van a ver tanto a Haaland como a Bernardo Silva jugando en el Camp Nou pero no va a ser con la indumentaria del conjunto catalán.

Este miércoles se miden el Manchester City y el Fútbol Club Barcelona en el Camp Nou en un partido amistoso de carácter benéfico contra la ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica) y el choque, más allá de lo social que es lo verdaderamente importante ya que se esperan recaudar fondos para la investigación contra esta enfermedad incurable, ha levantado también mucha expectación en el plano puramente deportivo. De hecho, se rozan ya las 80.000 entradas vendidas y se espera prácticamente un lleno en el estadio culé para la noche del encuentro.

El Barça sigue ilusionando en este inicio de temporada con todos sus fichajes y el Manchester City es uno de los grandes aspirantes a ganar la Champions League, tiene en sus filas a jugadores de primer nivel y además cuenta con el estimado Pep Guardiola dirigiendo desde el banquillo. Son, por lo tanto, muchos alicientes los que tiene el enfrentamiento pese a que sea de carácter amistoso y sobre todo el morbo será ver a Haaland, con quien Laporta llegó a soñar en algún momento, corriendo por el césped del Camp Nou, y especialmente a Bernardo Silva, con quien las negociaciones siguen abiertas. Quién sabe si dentro de unos días el portugués seguirá jugando en ese mismo estadio vestido de azulgrana.

Además, se espera que pueda jugar Koundé, que sigue sin ser inscrito en LaLiga al estar el Barça fuera del Fair Play financiero, pero será una buena prueba para que el francés demuestre que está a punto para entrar en el equipo en cuanto la burocracia lo permita.