La lista negra de Joan Laporta: despidos si llega al Barça

Hicieron un nuevo ridículo en la Champions

El Barça venció, no sin sufrimiento, al Dinamo de Kiev. Los de Ronald Koeman de nuevo dieron un paso atrás, y dejaron sensaciones bastante negativas, ya que, de no ser por Marc-André ter Stegen, difícilmente habrían conseguido los tres puntos. El internacional alemán regresó al equipo, y lo hizo como titular, y no notó el hecho de haber estado varios meses en el dique seco. Porque se puede decir sin ningún tipo de problema que fue el mejor del equipo.

Y eso la cosa no comenzó nada mal. Leo Messi puso en ventaja a los azulgranas con un gol desde los once metros, nada más comenzar el choque. De nuevo vio puerta, pero parece ser que, si no es de penalti, no es de otra forma. Gerard Piqué, ya en la segunda mitad, dio aire y puso más distancia de por medio, si bien Viktor Tsygankov se encargó de darle emoción al choque hasta el último momento. Al final, un dos a uno muy apretado, pese a las numerosas bajas de los ucranianos.

Joan Laporta vio los 90 minutos desde su casa, y quedó muy claro que, en caso de llegar al cargo, tiene mucho trabajo por hacer. Porque la realidad es que este equipo no aspira a ganar la Champions League, como avisaba Mircea Lucescu en la previa, y ha quedado demostrado. Necesitan de varios refuerzos de nivel en varias zonas del campo, y también, dar salida a varios cracks que no están rindiendo como se esperaba. Es el caso, por ejemplo, de Clément Lenglet.

Fue suplente, y al poco de entrar encajaron el tanto en contra, en el que fue retratado por ser demasiado blando. Igual que Jordi Alba, por cuya banda hicieron lo que les dio la gana, sin encontrarse con ningún obstáculo. Y no se puede olvidar hablar de Sergio Busquets, de nuevo en el once inicial, y que aguantó hasta que solo quedaba un cuarto de hora por jugarse. Físicamente ya no está para estos trotes, y piden a voces que le echen ya.

Igual que a Antoine Griezmann, que falló una ocasión muy clara, y que no volvió a aparecer. Sin duda, firmó una de sus noches más grises con el Barça, y eso que el listón está alto.

Laporta los echaría sí o sí.