Guardiola y Klopp instauran una dictadura; Tuchel y Rangnick se unen

Ningún país ha metido a tantos representantes en las fases finales de la Champions League en los últimos años como Inglaterra, y no solo en octavos, cuartos y semifinales, sino que tres de las últimas cuatro finales por ‘la orejona’ han tenido claro acento inglés. Pues bien, la exhibición de juego del Manchester City en Lisboa (0-5) y de pegada del Liverpool en el Giuseppe Meazza (0-2) no solo confirman un dominio total británico en el fútbol continental, sino que Tuchel y Rangnick pueden instaurar una auténtica dictadura a la inglesa.

 

El equipo de Guardiola y el de Jürgen Klopp se están disputando el cetro de la Premier League, con clara ventaja para los skyblue, y su dominancia en su liga se hace mucho más acuciada en la Champions League, donde ambos equipos ya tienen pie y medio (en el caso de los del Etihad Stadium casi los dos) en los cuartos de final de la mejor competición de fútbol del mundo, pero por si fuera poca confirmación para la Premier el nivel mostrado por citizens y reds, blues y red devils son favoritos también en sus respectivas eliminatorias.

 

 

El vigente campeón de Europa tiene frente a sí a un Lille que salvo sorpresa mayúscula caerá frente al empuje de los inquilinos de Stamford Bridge, con más experiencia, recursos y mejores jugadores; y si el equipo francés está en desventaja en su duelo con los londinenses, qué decir del Atlético de Madrid, que anda tan mal en LaLiga que hace de las continuas crisis del Manchester United una nimiedad.

Tengan en cuenta que el Bayern de Múnich y el Real Madrid comandan con puño de hierro sus respectivas ligas y sin embargo han sufrido de lo lindo en Champions, con un empate in extremis de los alemanes ante el Salzburgo y con los blancos cayendo en el Parque de los Príncipes, donde se han dejado meda eliminatoria. Por eso, bien parece que ser tercero o cuarto en la tabla inglesa vale hoy por hoy casi lo mismo que ser líder de Alemania, España y puede que también Francia. Juve y Villarreal son las otras esperanzas de Italia y España, aunque sus carreras en esta Liga de Campeones se antojan de corto recorrido.