Euforia en Champions pero Ancelotti sabe el ‘problema’ que se le viene encima por Rodrygo

Su actuación en el Etihad Stadium fue muy reseñable

Carlo Ancelotti, entrenador del Real Madrid, enfrenta un dilema en la temporada 24/25 al contar con tres de los mejores jugadores del mundo, pero con la particularidad de que Rodrygo Goes, Vinicius y Kylian Mbappé rinden mejor como extremos izquierdos. Esta situación plantea un desafío para el estratega italiano a la hora de decidir cómo organizar su alineación titular.

Rodrygo volvió a demostrar el miércoles una gran habilidad y versatilidad en el campo, siendo capaz de jugar tanto en el lado derecho como en el izquierdo del ataque. Su habilidad para desbordar y su visión de juego lo han convertido en una opción valiosa para Ancelotti. Sin embargo, el brasileño ha dejado claro en sus actuaciones que se siente más cómodo y obtiene mejores resultados jugando por la banda izquierda

Por su parte, Vinicius Jr se ha consolidado como uno de los talentos más prometedores del fútbol mundial. Su rapidez, regate y capacidad de generar peligro en el área rival lo han convertido en una figura clave en el Real Madrid. El ex del Flamengo ha sido una pieza fundamental para el club en temporadas anteriores y ha dejado en claro su preferencia por ocupar el extremo izquierdo.

La llegada de Kylian Mbappé al club en la temporada 24/25 añadiría una nueva dimensión a la delantera madridista. Considerado uno de los mejores jugadores del mundo, el galo es conocido por su velocidad, habilidad y capacidad para marcar goles y, al igual que sus futuribles compañeros brasileños, también prefiere jugar por la banda izquierda, lo que complica aún más la situación para Ancelotti.

El entrenador italiano se enfrenta a la difícil tarea de encontrar un equilibrio en su alineación, considerando el talento y las preferencias de estas estrellas. A colación de esto hay que decir que ima posible solución sería rotar a los atacantes para mantenerlos frescos y motivados o experimentar con diferentes formaciones que permitan a los tres jugadores compartir el campo. Otra opción sería desplazar a uno de ellos a una posición diferente, aunque esto podría afectar su rendimiento.

En cualquier caso, el técnico trasalpino tendrá que tomar decisiones estratégicas para sacar el máximo provecho de sus pupilos mientras mantiene la armonía y el equilibrio en el equipo.